Las moscas lanza de la familia Lonchaeidae constituyen un grupo de insectos relativamente poco estudiado a pesar de su amplia distribución y diversidad en las regiones tropicales y subtropicales del mundo. Su nombre común proviene de la forma alargada y puntiaguda de la estructura que utilizan las hembras para depositar los huevos, que, en muchas especies, recuerda a una pequeña punta de lanza. Son moscas de tamaño reducido, por lo general de 2 a 6 milímetros de longitud, con cuerpos oscuros y brillantes, generalmente metálicos, y que normalmente pasan desapercibidas por tener un comportamiento bastante discreto. A pesar de su discreción, varias especies son de gran importancia tanto ecológica como económica.
La familia Lonchaeidae incluye varios géneros relevantes, entre los cuales destacan Lonchaea, Dasiops, Silba y Neosilba. Estos géneros muestran una notable diversidad de hábitos y asociaciones ecológicas. Algunas especies se encuentran vinculadas con procesos de descomposición de materia orgánica, lo cual las convierte en importantes recicladoras de los ecosistemas. Otras, sin embargo, están directamente asociadas a cultivos de interés agrícola y pueden comportarse como plagas primarias, generando un daño directo, o como plagas secundarias, aprovechando un daño físico o el daño realizado previamente por una plaga primaria. Un caso reciente de plaga primaria es la mosca negra de la fruta, Silba adipata, una especie invasora que llegó a México en 2020 y que está ocasionando pérdidas económicas significativas en el cultivo de higo. Si bien hay algunas especies plaga primarias, la mayor parte de las especies de moscas lanza son consideradas plagas secundarias por lo que no han recibido la misma atención científica que otros grupos de moscas de importancia económica, como las moscas de la fruta de la familia Tephritidae.
Si bien existen interacciones significativas de estas especies en la agricultura, otro factor que ha dificultado su estudio se debe a que su taxonomía y correcta identificación resulta complicada, sobre todo en el caso de las moscas lanza. Las diferencias morfológicas entre especies son sutiles y requieren de especialistas para distinguirlas, en muchas ocasiones basándose en las estructuras reproductivas de los machos, un factor que ha limitado su estudio. Esta situación ha dado lugar a un escenario en el que gran parte de la diversidad de la familia permanece sin describirse, especialmente en las zonas tropicales, donde la riqueza de especies probablemente alcanza sus niveles más altos.
Países como Brasil y Colombia han avanzado en la identificación y descripción de nuevas especies y sus asociaciones con diferentes cultivos, aunque es evidente que queda mucho por conocer sobre su biología, ecología y distribución. México, a pesar de su posición geográfica estratégica y su enorme variedad de ecosistemas tropicales y subtropicales, se encuentra notablemente rezagado. El número de estudios dedicados a la familia Lonchaeidae en nuestro país es muy limitado, y gran parte de la información disponible proviene de registros incidentales en trabajos enfocados en otros grupos de insectos, principalmente de frutas infestadas con moscas de la familia Tephritidae.
Estudios recientes realizados en el Instituto de Ecología AC para estudiar el impacto de mosca negra del higo en Veracruz, han puesto de manifiesto una considerable interacción de esta plaga con diversas especies de moscas lanza de los géneros Lonchaea y Neosilba. Una revisión inicial en la región de Tatatila, realizada solo en el cultivo de higo, pone de manifiesto la presencia de al menos 10 especies diferentes de estas moscas asociadas a este cultivo, de las cuales la mitad han resultado ser nuevas especies basándose en estudios taxonómicos y el análisis de su ADN. De estas especies, dos resultaron nuevas para la ciencia y fueron nombradas Neosilba recurva y Neosilba flavitarsis, mientras que otras tres especies se encuentran en proceso de descripción formal (MacGowan et al. 2025; Lasa et al. 2025).
La exploración de la diversidad de Lonchaeidae en México representa una oportunidad científica clave para conocer su distribución y el papel que desempeñan en los ecosistemas tropicales mexicanos. Su estudio contribuye al entendimiento de la importancia de este grupo en la agricultura y fortalece el desarrollo de posibles estrategias de control biológico cuando algunas especies causan daños en los cultivos.
Referencias:
MacGowan, I.; Navarro-de-la-Fuente, L.; Williams, T.; Lasa, R. A new species of Neosilba (Diptera, Lonchaeidae) associated with fig orchards in Mexico. Zootaxa 2025, 5583, 195–200.
Lasa, R.; Navarro-de-la-Fuente, L.; MacGowan, I.; Williams, T. A complex of lance flies (Diptera: Lonchaeidae) infesting figs in Veracruz, Mexico with the description of a new species. Insects 2025, 16, 458.
1 Instituto de Ecología AC, Xalapa, Veracruz.
2 Facultad de Biología, Universidad Veracruzana, Xalapa, Veracruz.