
El arte neurodivergente, el que hace un ejercicio de memoria o el que reflexiona sobre la identidad constituyen las perspectivas utilizadas por los cuatro finalistas de los prestigiosos premios Turner de arte visual, que fueron presentados en una exposición conjunta este martes en Bradford (norte de Inglaterra).
Las pinturas, esculturas, fotografías, dibujos e instalaciones de Nnena Kalu -la primera artista individual con discapacidad en ser nominada para este galardón-, Rene Matić, Mohammed Sami y Zadie Xa se mostraron en la Cartwhright Gallery de Bradford, designada como Ciudad de la Cultura del Reino Unido en 2025.
Convocado por la Tate Britain de Londres, este galardón, dirigido a artistas nacidos o que realizan su trabajo en el Reino Unido y dotado con un 25.000 libras (28.640 euros) para el ganador, es considerado uno de los más importantes del mundo en el ámbito de las artes visuales y, desde su implantación en 1984, ha premiado a grandes figuras, como Andy Warhol o Anish Kapoor.
Arte desde el espectro autista
Una de las principales novedades en las nominaciones es la elección de una artista que se encuentra dentro del espectro autista y que no presenta una comunicación verbal.
Es el caso de la escocesa Nnena Kalu (Glasgow, 1966), que presentó tanto pinturas y dibujos como unas particulares esculturas colgantes elaboradas a base de cuerda, cinta de distintos materiales y telas que constituyen entre sí unos vórtices infinitos e hipnóticos llenos de color, texturas y formas que se asemejan a la de un gran ojo y atrapan al visitante desde distintas perspectivas.
“Nnena lleva trabajando con Arts Charity Action Space durante casi 25 años y, en particular, con su facilitadora artística, Charlotte Hollinshead, quien me contó que Nnena estaba increíblemente emocionada por haber sido nominada “, explicó a EFE Michael Richmond, uno de los comisarios del premio Turner.
Memoria e identidad
Dentro de la tradición reivindicativa y contemporánea que enmarca las obras de artistas premiadas por este galardón -que lleva el nombre de JMW Turner, de quien se celebra este año el 250 aniversario de su nacimiento- en esta edición se dio espacio a la búsqueda de la propia identidad, la memoria y la ambigüedad que ésta representa.
La joven fotógrafa inglesa Rene Matić (Peterborough, 1997) explora a través de esculturas, fotografías, sonidos y figuras cómo dentro de un contexto de ascenso del populismo de derechas, violencia e hipocresía, las personas son capaces de encontrar aspectos que las unan y las permitan ayudarse unas a otras.
“Se centra realmente en la sociedad, la identidad, creo que en las subculturas y la cultura juvenil; y en cómo encontramos un sentido de pertenencia”, explicó Richardson.
Por su parte, las pinturas del iraquí Mohammed Sami (Bagdad, 1984) buscan mostrar cómo los procesos de memoria suelen aflorar tardíamente y se vale de metáforas y ambigüedades para, omitiendo las figuras humanas de sus pinturas de gran tamaño, desplazar clichés, como en el caso del tema de la guerra.
Uno de esos murales, ambientado en un campo de trigo, exhibe los láseres de lo que podrían ser rifles, pero sin mostrar en la composición ni a estos ni a los soldados que los portarían, formando un mapa de líneas coloridas en un fondo oscuro.
Un océano de color inmersivo
Otra de las instalaciones más destacadas es la de la canadiense-coreana Zadie Xa (Vancouver, 1983), que ha creado una gran sala en la que el color, la luz y las formas dan vida a un entorno inmersivo que sumerge al visitante en un mundo basado en la vida marina, el chamanismo coreano y los espíritus fantasmales.
Con un suelo a modo de espejo dorado, del centro de la sala cuelgan cientos de campanas chamánicas, acompañadas de cuadros coloridos y de cuatro conchas en las esquinas que proyectan un paisaje de sonidos marinos, confesiones y música de Salpuri, una danza coreana de exorcismo.
“Zadie realmente concibe su práctica en términos de instalación y eso es una de las primeras cosas que los visitantes notarán al entrar en este espacio”, señaló Richmond.
El ganador de la edición de este año 2025 se dará a conocer el próximo 9 de diciembre y las obras podrán visitarse en la Cartwright Hall Art Gallery desde el 27 de septiembre de 2025 hasta el 22 de febrero de 2026 de forma gratuita.