¿Focos rojos en Filadelfia y Kansas City?
¿Acaso es escenario de focos rojos donde antes había luces brillantes? Suman dos semanas de derrotas consecutivas de Filadelfia y Kansas City, curiosamente los dos equipos que disputaron el anterior Super Bowl, y que, al menos hasta hace unas semanas lucían como los favoritos para una revancha en la edición 58 en Las Vegas.
Como es costumbre, y no podía ser de otra manera, las declaraciones van en una dirección, la de la esperanza y la de no caer en pánico, pero cuando vemos un poco más allá nos damos cuenta de que quizá son señales de diversos factores, de una debilidad que tal vez los otros equipos tardaron en descifrar, pero una vez que lo lograron, desenmascararon sus carencias.
Y se diga lo que se diga, esos bachecitos o tropiezos, a los que según no dan importancia, les ha costado hasta este momento perder la favorable condición de local durante la postemporada.
No es un secreto que terminar como el equipo número uno significa que la ruta hacia el Super Bowl pasa por el estadio del mejor sembrado, además de la semana extra de descanso, y si vemos las consecuencias de las caídas tanto de Águilas como de Jefes, pues resulta que en este momento la ruta hacia el Super Bowl de Las Vegas pasaría por San Francisco y Baltimore.
Aun así, las declaraciones, al menos desde los canales de información oficiales de ambos conjuntos es que todo esta bajo control, una afirmación hecha principalmente por los líderes de las Águilas, donde aunque se quiera esconder la verdad, la realidad es que se han empezado a encender los focos rojos.
Jalen Hurts, el publicitado quarterback de las Águilas, negó rotundamente que su equipo “se encuentre estancado en un bache; esto es como una gripe, pero nada grave”.
A simple vista puede ser, pero como se ha visto y comentado durante la temporada, Filadelfia no ha logrado jugar con el ritmo y contundencia de la campaña anterior. Más bien se las habían arreglado para sacar el resultado en varias ocasiones apoyándose en el talento personal, hasta que San Francisco logró neutralizar su ataque, misma fórmula que utilizó Dallas para revertir todo el escenario no sólo de la división Este sino de toda la NFC.
Por su parte, otro de los líderes de Filadelfia, Fletcher Cox, dijo que se han levantado las voces dentro del vestidor para motivar al grupo, por lo que espera que esta mala racha termine lo antes posible.
Es cierto que estarán de nuevo en postemporada, pero no como líderes de división, por lo que quizá sólo reciban un juego en su estadio, que es su guarida perfecta, misma que esta ocasión no los podrá arropar durante todo el camino hasta donde lleguen en playoff.
En cuanto a Kansas City, ya lo hemos comentado, y no nos hagamos que no lo entendemos, al pobre Pat Mahomes le urgen receptores. Dos derrotas consecutivas los han hundido en la siembra de AFC, posición que ahora ostenta Baltimore como el número uno y candidato a recibir toda la postemporada en su casa.
Pat Mahomes
Es verdad que fue polémica la derrota de los Jefes ante los Bills este domingo por ese castigo de fuera de lugar a la ofensiva por la alineación indebida de uno de sus receptores, pero la realidad es que si este equipo contara con un grupo similar de jugadores en esa posición como los tuvo hace algunas temporadas no habría llegado a esas instancias de ganar con las uñas y sólo con la dupla Mahomes-Travis Kelce.
Ofensivamente hacen lo posible e imposible para ganar, pero también se debe reconocer que les ha pegado la salida de Eric Bienemy, el exitoso coordinador ofensivo que partió a Washington.
Sin duda, esos dos factores se han sumado para que la crisis haya llegado a su punto más alto en Kansas City.
Podemos señalar que los desplantes de Mahomes en los últimos juegos, principalmente al terminar en juego ante Buffalo, deja ver un dejo de frustración como nunca lo habíamos presenciado en este jugador. El hecho de ir a encarar a un oficial para reclamarle habla de un hombre enojado, desesperado, que afortunadamente fue detenido por sus compañeros, pues de haber llegado ante el oficial nadie sabe qué habría sucedido dado lo “encendido” que estaba Mahomes en ese momento.
Sin más, la caída de estos dos favoritos, y quizá sumando a un equipo de Detroit que a pesar de su buena temporada que ha tenido, se ha desinflado en la última parte, nos habla de que, como lo hemos comentado en colaboraciones anteriores, los conjuntos que ganan en noviembre y diciembre son los que llegarán con mejores posibilidades rumbo a la postemporada, situación en la que se encuentran San Francisco, Dallas, Baltimore y Miami.
Aún resta exactamente un mes de actividad, sólo cuatro juegos para acomodar las piezas de los playoffs, y sin más, estos cuatro equipos nombrados arriba llevan ya una ventaja: están en ritmo y controlan su destino.