
Las autoridades sólo lograron detener a tres personas que cometieron el delito de rompimiento de sellos en inmuebles asegurados por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX). De 391 carpetas de investigación abiertas por este crimen en el periodo del 1 de octubre del 2024 al primer semestre del 2025, únicamente en un caso tres sujetos fueron presentados ante el Ministerio Público, lo que equivale el 0.77 por ciento de las denuncias en ese periodo.
Durante nueve meses, la Fiscalía de Investigación Estratégica Central únicamente tiene registro de tres inmuebles, de los 391 en los que se violaron los sellos en los que se pudo aprehender a los responsables; esto, según personal de la institución, se debe a que el procedimiento para la reposición de sellos, es decir, cuando el Ministerio Público debe de realizar una investigación para volver a asegurar el inmueble no es remunerado en los índices de productividad, sumado a que los procesos de devolución de inmuebles se estancan y rebasan las capacidades para que personal de la Policía de Investigación (PDI) mantenga vigilancia permanente al exterior de los predios que están sujetos a indagatorias.
Así como el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA) suspende actividades de establecimientos mercantiles o de construcciones irregulares, la Fiscalía capitalina clausura inmuebles en los que se cometió algún delito, como secuestro, narcomenudeo, compra venta de autopartes robadas y robo de vehículo. Esta problemática ha mantenido índices altos en los últimos años, inclusive, algunas alcaldías como Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero, en nueve meses acumulan el 21.5 y 21.4 por ciento respectivamente del total de las denuncias presentadas en tres años y medio en esas demarcaciones. De octubre del 2024 a junio del 2025, en el primer territorio se abrieron 75 carpetas y en el segundo 41, con un total de 348 y 191 en todos los años.
Crece 82% aseguramiento por delitos contra la salud
En información de la Fiscalía obtenida por Crónica, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Coyoacán, Milpa Alta y Tlalpan acumulan el 64.7 por ciento del total de los delitos por quebrantamiento de sellos, con 75, 41, 68, 35 y 34 denuncias respectivamente en nueve meses.
En la Ciudad de México, van mil 604 carpetas por rompimiento de sellos desde 2022 al primer semestre del 2025 por ese ilícito y 391 de octubre del 2024 a junio del siguiente año (con los cerrados por el INVEA). En ese lapso, la Fiscalía aseguró cinco inmuebles en 2022 por el delito de secuestro, equivalente al 15.6 por ciento de la incidencia de ese delito (32 carpetas); seis clausurados al año siguiente, 35.9 por ciento de los predios resguardados del acumulado de denuncias (17) el mismo número en 2024 y dos sitios “bloqueados” en el primer semestre del 2025, es decir, 66.6 por ciento de los sitios asegurados donde mantenían a personas privadas de su libertad de las tres carpetas que existen.
Del total de denuncias por quebrantamiento, la Fiscalía de Investigación de Delitos Ambientales acumuló 23 en 2022; 12 en el siguiente año; cuatro en 2025 y dos en los primeros seis meses del 2025.
Las autoridades también han pegado sellos en inmuebles con denuncias por delitos contra la salud (tráfico de drogas y la producción o comercialización de sustancias nocivas o adulteradas). De este crimen, se retuvieron 51 edificios, casas o locales en 2022; 17 en 2023; 35 en 2024 y 41 en el primer semestre del 2025. En sólo seis meses del último año, creció 82.7 por ciento el número de sitios asegurados conforme a los dos años anteriores y 15 por ciento más que en todo el año anterior.
Por el delito de narcomenudeo (venta y distribución de droga) del 2022 a junio del 2025 se colocaron sellos de aseguramiento en 692 edificaciones donde se cometía ese crimen, sitios en los que, afirmó la Fiscalía, después de varios años continúan las actividades de investigación. La colocación de sellos por este ilícito representa el 68.92 por ciento de los mil cuatro predios bloqueados por narcomenudeo, secuestro, delitos contra la salud y encubrimiento por receptación en el acumulado de todos los años.
Reposición de sellos no cuenta en productividad del MP
En entrevista con Crónica, un agente de la PDI que prefirió reservar su identidad, mencionó que la vigilancia a predios asegurados es complicada por el poco personal para resguardarlo, además de que una vez quebrados, en pocos casos es realizada la diligencia para la reposición de fajillas (sellos) e iniciar las indagatorias para descubrir quién los violó para cerrar nuevamente el inmueble. Declaró que al ser un proceso en el que no se reconoce en la productividad de los Ministerios Públicos, los sitios quedan en el abandono y las personas pueden tener acceso mientras siguen las investigaciones.
“Desde que se asegura el inmueble se asigna una custodia permanente, depende de quién haya realizado el cateo, hasta que se acredite la legítima propiedad del inmueble, a veces los dueños rentan los lugares a otros; en delitos contra la salud ese predio no se entrega porque se trata de extinguir el dominio. Las primeras dos semanas las custodias son permanentes, después la policía acude un día sí y otro no, cuando el cuidado es a cargo del PDI, es difícil porque no tenemos suficiente personal, somos alrededor de cuatro mil elementos, la Secretaría de Seguridad Ciudadana tiene capacidad para mantener la custodia por años y nosotros no más de un mes”.
“Si el Ministerio Público es ágil, las diligencias para devolver los inmuebles no pasan de un mes, los policías presionan para que se quite la custodia, no nos da para cuidarlos tanto. Es muy difícil acreditar que alguien rompió el sello porque se debe de hacer en flagrancia, que existiera un video o una imputación directa para que podamos detener a la persona; si no estuvimos cuando se rompió el sello pero lo encontramos dentro, asumimos que lo quebró, pero si no hay nadie o las personas que creemos que lo rompieron están afuera, no lo podemos acreditar”.
“Falta personal que resguarde los inmuebles, los policías dejan de vigilar alrededor de las 11 de la noche y se van a su patrulla a dormir, si no, se van del lugar y regresan al otro día. En la parte legal falta incrementar la pena e inhibir las ganas de ingresar. Donde clausuró un negocio es más probable el quebrantamiento de sellos que en una casa, si hay productos perecederos, autopartes ilegales o animales, es probable que entren. Para evitarlo se tendría que hacer una cadena de custodia con lo asegurado, pero en la práctica jamás pasa, no lo hacemos en sitios donde es difícil cuantificar, sólo se describe un aproximado”.
“Las sanciones son fuertes para los policías que no resguardaron de manera correcta el inmueble, es un proceso de destitución ante el Órgano de Control Interno, dependiendo de la afectación y lo faltante, pero lo evitan cuando sacan otra fajilla y lo pegan encima, por eso es difícil acreditarlo. Como en algunos cambios de custodia los agentes deben de ir a su cuartel, cuando regresan ya está roto el sello y se menciona en el reporte”, detalló el agente.

Reformas no incluyen quebrantamientos de sellos de la FGJ
Con todo y que a finales del 2024 se aprobó el incremento de penas de seis a 12 años de prisión a las personas que rompan o retiren los sellos de clausura, esto únicamente incluye a las obras para edificar edificios, sin que se incluyera a los inmuebles resguardados por sellos de la Fiscalía en los que se cometieron delitos de alto impacto.
La legislación sólo incluyó el término “suspensión de actividades” en relación con el delito de quebrantamiento de sellos, ya que la legislación solamente refiere a la “clausura”.
Aunque el crimen pasó de ser un delito leve (que no alcanza prisión preventiva) a uno grave, arrancar sellos pegados por la PDI aún no es castigado de manera severa.
Otro crimen en el que la Fiscalía acude constantemente a fijar sellos es el delito de encubrimiento por receptación (sin haber participado en un delito previo, adquiere, recibe o ayuda a ocultar los bienes provenientes de ese delito; beneficiarse o facilitar el provecho de los artículos robados) en el robo de vehículos y transporte.
Aunque las autoridades informaron la reducción del ocho por ciento de la incidencia de robo de vehículo sin violencia entre enero y julio del 2025, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Y en julio del 2025 se registró la baja del 10 por ciento respecto a al mismo mes del año pasado y más del 50 por ciento en comparación con julio de 2019, los trabajos para cerrar establecimientos donde se comete esa falta y se acusa a los involucrados en colaborar en las operaciones de esas células delictivas han aumentado.
En 2022 se aseguraron 86 inmuebles, cifra que representa el 6.48 por ciento de las mil 327 denuncias presentadas ese año. En 2023 se colocaron sellos en 50 sitios donde se cometió ese delito, 6.65 por ciento de las carpetas abiertas por encubrimiento y receptación (752); después, en 2024, la cifra de predios resguardados por la Fiscalía subió a 60 y en el primer semestre del 2025, fueron 97, 63.9 por ciento más de lugares asegurados que en 2023.