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Tras los desmanes en la macha, 7 policías fueron suspendidos temporalmente por probables faltas al protocolo; SSC omite mencionar uso de lacrimógeno

Informan GCDMX y SSC saldos de marcha Gen Z; van 7 detenidos al Reclusorio Norte

Vázquez Camacho omitió mención alguna con relación al gas lacrimógeno y gas pimienta empleado por la policía durante las confrontaciones con los embozados (Iván Guevara Ramírez/Iván Guevara Ramírez)

Luego de la marcha convocada en nombre de la Generación Z, el pasado 15 de noviembre, el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho, en mancuerna con la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina, dio parte de los saldos de la movilización.

El titular de la SSC recordó que el despliegue inicial de la fuerza policiaca para resguardar la marcha constó de 800 elementos entre personal de la Policía Preventiva y de la Policía Metropolitana, así como de la Subsecretaría de Tránsito y del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, ERUM. Vázquez resaltó que el personal desplegado contaba únicamente con “equipo de protección personal” compuesto de escudo acrílico, casco, rodilleras, coderas y algunos extintores para evitar posibles conatos de incendio que pusieran en riesgo a los manifestantes.

De acuerdo con Vázquez, los elementos de la SSC acompañaron el desarrollo de la marcha, inicialmente pacífico, desde el punto de partida en el Ángel de la Independencia, no obstante, el funcionario advirtió la detección temprana dentro del contingente de 10 personas embozadas que, empero, “no mostraron actitudes violentas” ni portaban objetos aptos para agredir. El mando acusó que alrededor de las 10 horas algunas personas embozadas y otras con el rostro descubierto comenzaban a congregarse en la plaza de la Constitución, según Vázquez, para “dialogar y coordinarse entre sí” con la finalidad de derribar las vallas, “como se había previsto en las convocatorias”, apuntó.

El funcionario rechazó la versión de que dicho grupo provenía del interior de las vallas, y aprovechó para precisar que los embozados contaban con esmeriles, cizallas, sierras eléctricas y cuerdas de tipo industrial para tirar de ellas y derribar el vallado, de nuevo: “como se aconsejó en algunos posteos en redes sociales”. A los pertrechos del citado “Bloque Negro”, el jefe policial agregó cohetones, bombas molotov y de humo, rocas y fragmentos de adoquín y más mobiliario público vandalizado; durante casi dos horas “la policía repelió las agresiones usando polvo químico de extintor, e intentando cortar la cuerda que había sido amarrada a las vallas”, el objetivo del Bloque Negro y de quienes se les sumaron, era “agredir y golpear a los elementos de la Policía de la Ciudad de México, incluso intentaron “prenderles fuego”, amplió.

A propósito de las confrontaciones, el policía señaló que visitó a los “compañeros” agredidos que requirieron ser trasladados a un hospital, esto, por instrucciones de la Jefa de Gobierno, reconoció. Luego de conceder que, por espacio de 15 minutos existió un momento en el que Policía y manifestantes entablaron diálogo “con el objetivo de cesar hostilidades”, apuntó que se registró un intento del Bloque Negro por entrar al edificio de la SCJN, contiguo a la refriega. Vázquez señaló que durante la referida pausa, la corporación extrajo a los policías lesionados y brindó atención a los elementos heridos, deshidratados y exhaustos; acusó que “grupos de provocadores” reanudaron las agresiones, lo que catalizó el ulterior avance de la formación policiaca para “desactivar agresiones y dispersar al grupo violento”. Tras lograr el repliegue de los manifestantes de la zona zócalo, la policía estableció “formaciones de contención en las calles aledañas”, labor que se extendió hasta las 20:00h en razón de la presencia de manifestantes que persistieron en dañar propiedad pública y privada, incursiones que Vázquez ejemplificó al citar el saqueo de una sucursal de Luz Saviñón, en la calle de Palma, hecho registrado a las 16h con 32 minutos.

ASUNTOS INTERNOS

Pablo Vázquez añadió que la Dirección General de Asuntos Internos ya realiza un análisis de los videos, imágenes e información disponible en fuentes abiertas y registros de la SSC para identificar incidentes “potencialmente constitutivos de violaciones al protocolo de actuación policial” y otras disposiciones legales “incluyendo episodios de posible uso excesivo de la fuerza”; sobre esta línea, añadió, se han ubicado 18 de estos casos, lo que a su vez obligó a la apertura de igual número de investigaciones internas que engloban entrevistas con los uniformados involucrados. Siete de tales investigaciones ya cuentan con elementos suspendidos de forma temporal en tanto concluyan las indagaciones.

DERECHOS HUMANOS

El mando a cargo de la Seguridad Ciudadana en la capital enfatizó que no será tolerado ningún acto contrario al ethos protocolario de la policía y se sancionará a cualquier elemento que caiga en tales comportamientos, subrayó que la SSC se mantiene en estrecha coordinación con la Fiscalía de la CDMX y los organismos de derechos humanos para coadyuvar en las indagatorias; sin embargo, Vázquez Camacho omitió mención alguna con relación al gas lacrimógeno y gas pimienta empleado por la policía durante las confrontaciones con los embozados.

A los pertrechos del citado “bloque negro”, el jefe policial agregó cohetones, bombas molotov y de humo, rocas y fragmentos de adoquín y más mobiliario público vandalizado (Iván Guevara Ramírez/Iván Guevara Ramírez)

DETENCIONES Y HERIDOS

El saldo final de personas lesionadas esgrime a 60 policías atendidos en el lugar y 40 trasladados a hospitales, de los cuales 26 ya fueron dados de alta, al tiempo que 14 reciben “atención especializada”. En tanto, 20 civiles heridos recibieron atención en el sitio.

Sobre las detenciones, Vázquez dio parte de 29 personas remitidas al MP y 30 al juzgado cívico, del primer grupo 10 fueron derivadas finalmente al juez cívico y un menor de edad al sistema de justicia para adolescentes. Al corte, siete personas presuntamente involucradas en actos violentos durante la marcha fueron trasladados el Reclusorio Preventivo Varonil Norte, para continuar su proceso penal. Tres de los señalados fueron imputados por tentativa de homicidio en la Fiscalía de Investigación Territorial Cuauhtémoc - 2 y posteriormente, elementos de la Policía de Investigación (PDI) realizaron un fuerte dispositivo de seguridad para llevar a bordo de una furgoneta color negra a los siete detenidos para recluirlos y posteriormente, enfrentar su audiencia inicial el próximo 18 de noviembre; otros cinco detenidos, que aún no se procesa su traslado, fueron imputados por resistencia de particulares, en tanto que dos personas más por lesiones y robo y cinco más por lesiones. Algunos de los imputados son:

*Luis Fernando “N”, de 18 años

*Alberto “N”, de 26 años

*Fernando “N”, de 24 años

*Federico “N”, de 65 años

*José Enrique “N”

*Sergio Eduardo “N”

*José Luis “N”

*Bryan Alexis “N”

*David “N”

Estas personas fueron acusadas por las autoridades de aparentemente haber golpeado a elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) en la manifestación, con machetes, objetos punzocortantes, armas blancas y coladeras. Previo a su traslado al penal en la alcaldía Gustavo A. Madero, los familiares de los detenidos se manifestaron al exterior de la Fiscalía de Cuauhtémoc, donde reprocharon que los policías fueron quienes agredieron a los protestantes y, señalaron, la detención fue ilegal; además, exigían justicia y mayor información del estado de salud y estatus jurídico de los imputados, por lo que intentaron detener el paso de vehículo, entre empujones y gritos en contra de las autoridades.

Una mujer, familiar de uno de los detenidos, bloqueó el paso de la unidad. Entre llanto y súplicas, los agentes la retiraron del suelo y el convoy siguió su camino hacia el Reclusorio.

El titular de la SSC recordó que el despliegue inicial de la fuerza policiaca para resguardar la marcha constó de 800 elementos entre personal de la Policía Preventiva y de la Policía Metropolitana, así como de la Subsecretaría de Tránsito (Iván Guevara Ramí/Iván Guevara Ramírez)

NIEGAN REPRESIÓN

La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, recalcó que la policía no utilizó la fuerza ni la violencia durante la marcha de la Generación Z, del mismo modo, condenó los actos violentos cometidos por el Bloque Negro y otras personas en tanto constituyeron medios para difundir la “narrativa de la represión” de la “oposición”. De acuerdo con la mandataria local, “la marcha del sábado estuvo impulsada por grupos de oposición (…) con la cobertura del nombre de otros movimientos de jóvenes”, explicó. La jefa detalló que la policía capitalina no recurrió a medios represivos, sino que se limitó a “contener” la violencia, orden expresa además del comando a “no reprimir”.

Brugada aseveró que el personal de la SSC no iba armado y no utilizó “artefactos como en otras partes del mundo”, enseres tales como “balas de goma, toletes o cañones de agua”. De forma explícita desmintió el uso de gases lacrimógenos, aseguró que únicamente fue empleado “humo de extintores”.

Finalmente, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó que se investigará a algunos de los participantes de la marcha para determinar si buscaban generar violencia y esclarecer si ostentan vínculos con miembros del crimen organizado o si forman parte de este .

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