
El vicepresidente estadounidense, JD Vance, considera que el chat privado en el que durante siete meses jóvenes republicanos profesaron su amor por Hitler no debe tomarse en serio, asegurando que los mensajes intercambiados no eran más que “bromas” o a lo sumo “estupideces”.
“La realidad es que los chicos hacen tonterías, especialmente los niños varones. Cuentan chistes provocadores, ofensivos. Eso es lo que hacen. Realmente no quiero que vivamos en un país donde un chico que cuenta un chiste tonto —uno muy ofensivo y estúpido— sea motivo suficiente para arruinarle la vida”, dijo en el pódcast The Charlie Kirk Show, aunque los usuarios no eran precisamente niños sino jóvenes entre 22 y 34 años.
Expresiones como “Yo amo a Hitler” o “hay que violar” a los enemigos, en referencia a los liberales, salieron a la luz esta semana tras una investigación del sitio digital Politico sobre un grupo de Telegram de jóvenes republicanos-, incluidos líderes estatales y al menos un trabajador de la Administración de Donald Trump, que estaba plagado de contenido racista, antisemita y homófobo, incluidas bromas sobre esclavitud.
En ese chat, que se extiende de enero a mediados de agosto, se hablaba de “violar” a enemigos políticos y de presionarlos para que se suiciden; uno de los participantes, Peter Giunta, que trabajaba para el asambleísta republicano de Nueva York, Mike Reilly, y se postulaba para ser el presidente de la Federación Nacional de Jóvenes Republicano, advertía que quienes votaran en contra de su candidatura a presidente de la Federación Nacional de Jóvenes Republicanos iban a acabar en la cámara de gas.
“¿Podemos arreglar las regaderas? Las cámaras de gas no encajan con la estética de Hitler”, escribió Reilly, comentario que le ha costado su trabajo y su carrera política, al igual que el de otros internautas republicanos neonazis.
Mientras Vance defendía a los integrantes de este grupo, el gobernador de Vermont, el republicano Phil Scott, pidió que el líder del grupo Jóvenes Republicanos de Vermont, Sam Douglass, renuncie a su puesto de forma inmediata y abandone el partido.
En The Charlie Kirk Show, podcast fundado por el activista ultraderechista Charlie Kirk, asesinado a tiros el pasado septiembre en un acto al aire libre, Vance sugirió que el verdadero problema es la idea de que una broma ofensiva puede arruinar la vida de una persona joven.
El vicepresidente sostuvo que “una persona que desea seriamente la violencia política y el asesinato político es mil veces peor que lo que diga un grupo de jóvenes, un grupo de chicos, en un chat grupal, por muy ofensivo que sea”.
Sin embargo, sus palabras se contradicen con los hechos. Esta misma semana el Departamento de Estado estadounidense revocó el visado a seis personas, cuatro de ellas latinoamericanas, por críticas a Kirk en mensajes en las redes en el que algunos de los afectados sostenían que murió “demasiado tarde” siendo “racista y misógino”.
“Trump, el Hitler estadounidense”
Vance, de 41 años y padre de tres hijos pequeños, apunta que recomienda a sus hijos, especialmente a los dos varones, que tengan cuidado con lo que vayan a publicar: “Si pones algo en un chat grupal, asume que algún sinvergüenza lo filtrará en un intento de hacerte daño a ti o a tu familia”, subrayó.
El propio Vance fue víctima de sus comentarios neonazis dirigidos a Trump, al que criticó duramente en 2016, cuando lo llamó “venenoso” y el “Hitler estadounidense”.
Para sorpresa de muchos, Trump lo eligió como compañero de fórmula en las elecciones de 2024, que ganó el republicano.