
Rodrigo Moheno, director general de Fundación México Vivo, sostuvo que en nuestro país sí es posible acabar con el SIDA, de cara hacia el 2030, sin embargo, enfatizó, es necesario contar con el “compromiso sostenido de todos los sectores de la sociedad para crear un entorno que favorezca la prevención, el diagnóstico temprano y la atención de calidad”.
En este sentido, resaltó que la PrEP, es una herramienta fundamental dentro del enfoque de prevención combinada, así como pruebas rápidas y autoprueba de VIH, que facilitan el diagnóstico temprano.
El también presidente de la Federación Mexicana de Educación Sexual y Sexología (FEMESS), subrayó que con el fortalecimiento del diagnóstico temprano y la implementación de la prevención combinada, se tiene ya un avance significativo hacia el cumplimiento de las metas del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA)”.
Resaltó que el contexto epidemiológico actual, de las personas viviendo con VIH a nivel nacional, hay 310 mil hombres mayores de 15 años, así como 71 mil mujeres mayores de 15 años y 3,800 niños, niñas y adolescentes menores a 15 años de edad, datos que dejan en claro la importancia de mantener intervenciones diferenciadas y culturalmente apropiadas para cada grupo poblacional.
Es importante mencionar que dentro de las metas nacionales proyectadas hacia 2030, en alineación con los objetivos propuestos por ONUSIDA, conocidos como las metas 95/95/95, hay tres componentes fundamentales: que el 95% de las personas portadoras del virus conozcan su estado serológico, que el 95% de quienes han sido diagnosticados accedan a terapia antirretroviral, y que el 95% de los individuos bajo tratamiento alcancen la supresión viral.
Al respecto, Rodrigo Moheno destacó que para ello se requiere una cooperación interinstitucional y multisectorial desde la rectoría del estado y el liderazgo de las comunidades, toda vez que “alcanzar dichos objetivos será posible solo con la colaboración de las organizaciones de la sociedad civil, pero también de las instituciones de salud, de la iniciativa privada, de la academia, de los medios de comunicación, del sistema educativo y de los organismos internacionales para superar los retos que implican el estigma y la discriminación, así como para facilitar y hacer más expedito el diagnóstico, el inicio inmediato de tratamiento, y acelerar el acceso a la profilaxis pre-exposición (PrEP)”.
En México, dijo, se cuenta con herramientas innovadoras y altamente eficaces para combatir el VIH, como la PrEP, una de las estrategias más efectivas basadas en evidencia para prevenir su transmisión, cuya efectividad en intervenciones se ha documentado en la revista The Lancet, publicación que reveló que la PrEP es de gran ayuda para prevenir nuevos casos de VIH.
No obstante, el impacto depende del alcance de la PrEP hacia las personas con mayor riesgo, la adherencia y persistencia en el tratamiento; es decir, a mayores niveles de cobertura con PrEP, una mayor reducción de diagnósticos positivos.
“La PrEP se ha consolidado como una herramienta fundamental dentro del enfoque de prevención combinada que agrupa múltiples estrategias para ofrecer una protección integral a las personas en situación de mayor vulnerabilidad, respaldada por evidencia científica que la consolida como una parte esencial de la respuesta al VIH, y como parte de la gran oportunidad en nuestro país para evitar nuevas infecciones”.
En la actualidad, tenemos un avance crucial en el acceso con la autoprueba de VIH, la cual permite que las personas conozcan su diagnóstico de manera inmediata y accedan rápidamente a servicios de asesoría, seguimiento y vinculación a tratamiento o prevención del VIH, lo que ratifica que en México contamos con herramientas que facilitan una detección oportuna y una prevención más efectiva”.
Profilaxis pre y post exposición
Además, la profilaxis pre-exposición (PrEP), y la profilaxis post-exposición (PEP) se han establecido como componentes esenciales de la prevención combinada, que se complementan con programas de educación integral en sexualidad y estrategias focalizadas para fortalecer el acceso de las poblaciones con mayor vulnerabilidad.
La implementación exitosa de dichas estrategias posiciona a México como un referente regional en la respuesta al VIH, porque se demuestra que es posible avanzar hacia la eliminación del sida como problema de salud pública cuando se combinan herramientas científicamente probadas con un enfoque centrado en las personas y sus derechos, así como la colaboración entre organizaciones e instituciones de salud gubernamentales.
Además, hizo hincapié en iniciativas como la Red de Respuesta al VIH en México, que permite un seguimiento de los avances en las metas nacionales proyectadas hacia 2030 en alineación con los objetivos propuestos por ONUSIDA.
Rodrigo Moheno expuso que Fundación México Vivo, además de aportar en prevención brindando PrEP gratuitamente, realiza la donación de 1 millón de condones anuales en apoyo a 53 organizaciones en todo el país, al tiempo de realizar más de 50,000 pruebas de VIH, detección de otras ITS y la vinculación a atención a quien la requiere, y se brinda consejería y asesoría en salud sexual de manera integral y enfocada en cada persona y en sus necesidades individuales.