
Cervezas mexicanas con exceso de azúcar que superan a un refresco
La cerveza es una bebida que forma parte de la cultura mexicana desde hace generaciones. Cuando alguien piensa en una, generalmente lo relaciona con algo refrescante, alegre o quizás social, pero pocas veces con el exceso de azúcar.
Un estudio reciente de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) encendió la alarma al revelar que algunas cervezas mexicanas más consumidas tienen niveles de azúcar tan altos que podrían competir directamente con los de un refresco.
Este hallazgo mueve las piezas del juego cervecero y lo coloca en “otro costal”, pues ya no solo hay que cuidar los grados de alcohol o el sabor que ofrecen, sino también el impacto que no te imaginas que podría tener en tu cuerpo sin saberlo.
¿Cuánto azúcar tiene la cervezas?
De acuerdo con el análisis de Profeco:
Algunas cervezas saborizadas o mezcladas con jugos y edulcorantes alcanzan entre 5 y 15 gramos de azúcar por porción; es decir, casi tres cucharaditas.
En algunas versiones específicas, fue posible detectar hasta 35 gramos de azúcar en una sola lata. Esto sería el mismo contenido que un refresco de lata de 355 ml.
Lo más preocupante, además del serio impacto a la salud, ha sido descubrir que no existe ningún tipo de regulación que orille a los fabricantes a colocar los ya populares “sellos” o a declarar el contenido exacto de azúcar en las etiquetas de las cervezas, causando que los consumidores toman decisiones “a ciegas”.
Las 5 cervezas mexicanas que Profeco señala
De acuerdo con las investigaciones de la Profecoz, las marcas con mayor contenido de azúcar son:
- Modelo Especial
- Corona Extra
- Sol
- Michelob Ultra (versiones saborizadas)
- Bud Light (versiones saborizadas)
Estas cervezas no en todas sus versiones tienen los niveles elevados, pero las opciones con sabor agregado o mezclas son las que más disparan la glucosa.
Azúcar en la cerveza, un riesgo para tu salud
Puede que “una chela de vez en cuando” no parezca grave, pero agregar azúcar disfrazada al combo cambia la ecuación:
- Obesidad: el consumo frecuente de azúcar se relaciona directamente con el aumento de peso.
- Resistencia a la insulina y diabetes tipo 2: cuando el cuerpo debe procesar glucosa extra de forma regular, se puede desajustar y generar este tipo de enfermedades.
- Problemas cardiovasculares: el Estas exceso de azúcar y calorías puede elevar la presión arterial, lípidos y estrés oxidativo.
- Carga adicional al metabolismo alcohólico: cuando mezclas alcohol y azúcar, tu cuerpo tiene que hacer malabares para procesar carbohidratos y metabolizar el etanol, lo que puede aumentar los procesos inflamatorios y el daño hepático.
La Profeco advierte que estos riesgos se multiplican si bebes más de una lata o si lo haces con frecuencia.
¿Cómo elegir tu cerveza ideal?
Aquí unos tips para brindar de una forma “más saludable”:
- Optar por las opciones light, sin alcohol o artesanales, es una mejor decisión al tener menos azúcar añadida.
- Lee cuidadosamente las etiquetas: aunque no siempre incluyan azúcar, busca versiones que indiquen “sin azúcares añadidos” o “menor aporte calórico”.
- Evita las versiones saborizadas o “mezcladas” (cervezas con jugos, saborizantes o edulcorantes).
- Modera el consumo: entre menos ingieras, menor será el riesgo.
- Alterna agua o bebidas sin azúcar entre cervezas en las reuniones.
Lo que Profeco propone
Para que una cerveza deje de ser “azucarera disfrazada”, algunas acciones clave podrían ser:
- Transparencia obligatoria: que las cerveceras tengan que declarar claramente el contenido de azúcar en todas sus versiones.
- Regulación más estricta: leyes que limiten los gramos de azúcar permitidos en bebidas fermentadas.
- Retiro del mercado: Profeco ya solicitó la retirada de algunas marcas con niveles extremos.
- Educación al consumidor: campañas que ayuden a diferenciar entre “cerveza tradicional” y versiones endulzadas.
Tomar cerveza puede seguir siendo parte de tu vida social sin traicionar tu salud. Pero ya no solo importa “que sepa rica”, ahora toca que “no represente un consumo de azúcar inesperado”.