Poco a poco el matrimonio igualitario, es decir, entre dos personas del mismo sexo, avanza en México pero aún hay reticencias en algunos estados donde no está permitida esta figura y solo a través de recursos jurídicos, las pareja pueden aspirar a contraer nupcias.

En México, 26 de los 32 estados el matrimonio igualitario ya es permitido y en los restantes seis, las parejas del mismo sexo pueden casarse, pero deben antes obtener un amparo judicial.

Durango, Guerrero, Estado de México, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz, son esas seis entidades que aún no modifican sus respectivos códigos civiles para hacer realidad esta figura, explica un análisis del Instituto Belisario Domínguez del Senado

En esos estados, el matrimonio civil sigue estando consagrado a la unión de un hombre y una mujer y las parejas del mismo sexo requieren tramitar un juicio de amparo para poder contraer matrimonio civil.

Esto a pesar de que la SCJN en la materia ha establecido que “Toda ley de cualquier entidad federativa que limite el matrimonio a un hombre y una mujer, excluyendo de él a las parejas del mismo sexo o considere que la finalidad de la institución del matrimonio es la procreación, resulta inconstitucional, ya que conllevan un acto de discriminación” , establece

“Esta desigualdad que prevalece en México en el reconocimiento y ejercicio del derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo se debe, en parte, a la multiplicidad de códigos civiles o familiares que rigen en cada una de las 32 entidades federativas, además del Código Civil Federal”, explica un análisis del Instituto Belisario Domínguez del Senado.

El proceso para reconocer esta figura ha sido lento en México. De hecho, esta cifra de estados que no permiten el matrimonio igualitario era de 12 el año pasado.

Sinaloa, Baja California, Yucatán, Querétaro, Sonora y Zacatecas apenas en el 2021 reformaron sus códigos civiles para aprobar las uniones matrimoniales entre personas del mismo sexo.

En el estudio denominado “ La regulación del matrimonio civil entre personas del mismo sexo en México”, establece que no puede seguir prevaleciendo en nuestro país que en algunos estados o entidades federativas se goce de un amplio abanico de derechos, en tanto que en otros se sigan imponiendo restricciones al reconocimiento o ejercicio de derechos por razón de la orientación sexual.

Ello—agrega- violenta los derechos humanos y atenta contra la dignidad de las personas, lo cual, desafortunadamente se mantendrá en el país mientras no se modifique en todo el territorio nacional el marco normativo en torno al matrimonio entre personas del mismo sexo, eliminado así los obstáculos normativos que impiden o limitan el matrimonio igualitario

“Todas y todos los mexicanos tenemos los mimos derechos, no se puede excluir a nadie de su goce y ejercicio”, asevera

Poco a poco el matrimonio igualitario, es decir, entre dos personas del mismo sexo, avanza en México pero aún hay reticencias en algunos estados donde no está permitida esta figura y solo a través de recursos jurídicos, las pareja pueden aspirar a contraer nupcias.

En México, 26 de los 32 estados el matrimonio igualitario ya es permitido y en los restantes seis, las parejas del mismo sexo pueden casarse, pero deben antes obtener un amparo judicial.

Durango, Guerrero, Estado de México, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz, son esas seis entidades que aún no modifican sus respectivos códigos civiles para hacer realidad esta figura, explica un análisis del Instituto Belisario Domínguez del Senado

En esos estados, el matrimonio civil sigue estando consagrado a la unión de un hombre y una mujer y las parejas del mismo sexo requieren tramitar un juicio de amparo para poder contraer matrimonio civil.

Esto a pesar de que la SCJN en la materia ha establecido que “Toda ley de cualquier entidad federativa que limite el matrimonio a un hombre y una mujer, excluyendo de él a las parejas del mismo sexo o considere que la finalidad de la institución del matrimonio es la procreación, resulta inconstitucional, ya que conllevan un acto de discriminación” , establece

“Esta desigualdad que prevalece en México en el reconocimiento y ejercicio del derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo se debe, en parte, a la multiplicidad de códigos civiles o familiares que rigen en cada una de las 32 entidades federativas, además del Código Civil Federal”, explica un análisis del Instituto Belisario Domínguez del Senado.

El proceso para reconocer esta figura ha sido lento en México. De hecho, esta cifra de estados que no permiten el matrimonio igualitario era de 12 el año pasado.

Sinaloa, Baja California, Yucatán, Querétaro, Sonora y Zacatecas apenas en el 2021 reformaron sus códigos civiles para aprobar las uniones matrimoniales entre personas del mismo sexo.

En el estudio denominado “ La regulación del matrimonio civil entre personas del mismo sexo en México”, establece que no puede seguir prevaleciendo en nuestro país que en algunos estados o entidades federativas se goce de un amplio abanico de derechos, en tanto que en otros se sigan imponiendo restricciones al reconocimiento o ejercicio de derechos por razón de la orientación sexual.

Ello—agrega- violenta los derechos humanos y atenta contra la dignidad de las personas, lo cual, desafortunadamente se mantendrá en el país mientras no se modifique en todo el territorio nacional el marco normativo en torno al matrimonio entre personas del mismo sexo, eliminado así los obstáculos normativos que impiden o limitan el matrimonio igualitario

“Todas y todos los mexicanos tenemos los mimos derechos, no se puede excluir a nadie de su goce y ejercicio”, asevera