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Enseñanza y principios de Benedicto XVI siguen vigentes: Barranco Chavarría

El Papa Emérito mostró a Iglesia Católica cómo tener cimientos firmes para seguir creciendo sin perder su esencia; Francisco no ha roto con estos enfoques

Defensa de Vida y Familia

El Papa Benedicto XVI visitó México en 2012 y le conmovió la fe del pueblo, que lo encendió públicamente y se dejó querer y abrazar por la gente.

El Papa Benedicto XVI visitó México en 2012 y le conmovió la fe del pueblo, que lo encendió públicamente y se dejó querer y abrazar por la gente.

Cortesía de la Embajada de México en la Santa Sede

La gran enseñanza del Papa Emérito Benedicto XVI a la Iglesia Católica es que puede seguir creciendo sin perder su esencia, sus principios, opinó el Embajador de México en el Vaticano, Alberto Barranco Chavarría.

“La profundidad con que (Joseph) Ratzinger asumía sus estudios le permite a la Iglesia Católica tener un cimiento mayor para poder, en su momento, seguir creciendo sin perder la esencia, eso es lo importante, que no se pierda la esencia, creo que esa es la gran enseñanza”, señaló el diplomático mexicano.

Entrevistado en exclusiva por Crónica en ocasión del fallecimiento del Papa Emérito a sus 95 años, Barranco Chavarría señaló que el Papa Francisco, sucesor de aquel, no ha roto con los enfoques que defendió Ratzinger en su defensa de la vida, la Familia y el Matrimonio.

Se trata de dos visiones, explica, una más profunda de Ratzinger, y otra visión más cercana a la vida cotidiana, del Papa Francisco; “sin embargo, los principios son los mismos”.

El Papa Francisco no ha roto con ese tipo de enfoques que se tienen con la doctrina de la Iglesia Católica, por ejemplo, el aborto, la eutanasia, desde luego el Matrimonio entre un hombre y una mujer, señala el Embajador Barranco Chavarría.

Detalla que la diferencia es que “el Papa Francisco transige en un momento dado, y dice bueno si quieren que haya unión de carácter cívico y social entre personas del mismo sexo, bueno sería para efectos de protección mutua pero no puede haber un sacramento, no podemos casarlos porque la Iglesia Católica dice, de acuerdo con el principio evangélico, de acuerdo con la Biblia, que los Matrimonios son entre personas del sexo opuesto”.

Explica al reportero que “el Papa Francisco tiene una idea un poco menos drástica en esto tipo de cuestiones, pero las mantiene intactas; nadie puede decir que el Papa está abriendo el camino para una situación distinta”.

Culto y generoso

Alberto Barranco Chavarría, profundo conocedor de los acontecimientos en El Vaticano dado su perfil también como Cronista de la Ciudad de México, relata que el Papa Francisco habló de su antecesor en la misa que se celebró con motivo de fin de año y Gratitud.

El Embajador de México ante el Vaticano, Alberto Barranco Chavaría, ha logrado dinamizar las relaciones culturales entre México, la Santa Sede, y los mexicanos en Roma.

El Embajador de México ante el Vaticano, Alberto Barranco Chavaría, ha logrado dinamizar las relaciones culturales entre México, la Santa Sede, y los mexicanos en Roma.

Cortesía de la Embajada de México en la Santa Sede

“Habló del Papa Ratzinger, del Papa emérito, y dijo que era un hombre que tenía una gran generosidad; yo creo que la tuvo en el momento en que no intervino en las cuestiones del gobierno de la Iglesia”, explica el Embajador mexicano.

Dice que desde el momento en que Ratzinger presentó su renuncia, no intervino en las cuestiones de la Iglesia, “aunque la gente acudiera para pedirle consejo en los primeros días, los primeros meses y años, pues su salud fue minando y ya recibía solamente a unas cuantas personas esporádicamente, pero esto no implica que el Papa Francisco, en su momento, no lo consultara”.

México y Benedicto XVI

Alberto Barranco recuerda cuando el Papa Benedicto visitó México y lo que sucedió con su temperamento.

“Cuando sintió el calor de México en marzo de 2012, en Silao durante una misa en donde hubo una gran cantidad de personas en el Cerro del Cubilete, él siendo una persona retraída de pronto se conmovió, en alguna forma se encendió con el calor mexicano, se puso el sombrero de charro, abrazó a las niñas, se dejó querer como decimos vulgarmente, por la gente que se acercaba con él y quería una bendición, quería besarle el anillo pontificio; en alguna forma se adaptó a las circunstancias”, explica.

El diplomático dice que Ratzinger fue un Papa de Gabinete, introvertido, pero al mismo tiempo un hombre de una gran profundidad en sus estudios de carácter teológico y fue también un católico ortodoxo.

“Alguien que no transigía con los principios fundamentales de la Iglesia Católica con relación al celibato de los sacerdotes, la no posibilidad de mujeres como sacerdotisas, con relación al aborto y la eutanasia, temas no estaban dentro de su marco y lo explicaba a través de sus textos de carácter teológico”, detalla.

Barranco Chavarría manifiesta que Benedicto XVI estuvo en una época importante para la Iglesia, “aportó su propio grano de arena en un escenario en que había pasado el Concilio Vaticano II, la Iglesia estaba en proceso de aggiornamento (renovación y modernización) y él dio solidez y fortaleza a los cimientos de la Iglesia dentro de su marco de carácter teórico, pero que al mismo tiempo no desdeñó la cuestión práctica”.

Dentro de su visión hacia la teología, hacia el cielo, tenía también la posibilidad de voltear a ver lo que estaba pasando en el mundo y por eso en algún momento dado pudo encarnar la teología con el momento presente que se estaba viviendo, señala.

Doctor de la Iglesia

El Papa Ratzinger era una persona que tenía la posibilidad de poder entender no solamente la doctrina sino el interior de la gente, y esto le permitiría en su momento en convertirse en Doctor de la Iglesia como fueron San Agustín, Santo Tomás de Aquino, siempre y cuando llegara a ser canonizado.

El Papa Emérito, Benedicto XVI, defendió celosamente los principios esenciales de la Iglesia Católica y abrazó la humildad de pedir perdón por los agravios de esta.

El Papa Emérito, Benedicto XVI, defendió celosamente los principios esenciales de la Iglesia Católica y abrazó la humildad de pedir perdón por los agravios de esta.

Cortesía de la Embajada de México en la Santa Sede

“Podría alcanzar ese rango, pero siempre se le recordara como un hombre de estudio, de libros, de expedientes, de reflexión, sobre todo; los últimos casi 10 años después de su renuncia los pasó prácticamente en meditación, oración y desde luego en estudio”, dice.

Señor Embajador, ¿Qué sigue en el marco protocolario, se le dará un sepelio de Estado?

“Estamos hablando de una situación inédita porque ciertamente ya son muchos años donde no ha habido dos Papas; habría que revisar totalmente cuál es la formalidad ceremonial que se sigue para estos casos”, explica.

Lo interesante, por ejemplo, es que esta vez a diferencia de las anteriores cuando muere un Papa, el Cardenal decano es el que celebra la Misa de Exequias; en este caso muere un Papa y otro Papa, Francisco, es quien que hará la Misa de Exequias.

Sencillo y sin Invitados

Barranco Chavarría cuenta que el Papa Emérito será inhumado, sepultado, en un lugar que corresponde a los Papas.

Estamos hablando de las criptas que están debajo de la Basílica de San Pedro; decidió que su inhumación, su sepelio fuera justamente en el lugar donde había estado el cadáver de Juan Pablo II, quien después de ser canonizado su cadáver fue subido a una de las capillas de la Basílica de San Pedro, revela Barranco Chavarría.

“Este lugar esta exactamente frente a donde fue la tumba de San Pedro, ese es el lugar que él escogió para ser sepultado; él decidió que su funeral fuera lo más austero y sencillo posible”, revela.

En consecuencia, no se está invitando, no se está abriendo el escenario a delegaciones oficiales de diversos países como se hizo en el caso de San Juan Pablo II, donde acudieron un millón de personas desde monarcas, aún los no católicos, como jefes de Estado y de Gobierno.

En este caso solamente se está invitando como delegación oficial al Gobierno Alemán, por ser el lugar de nacimiento de Ratzinger, y al Gobierno italiano por ser el país donde vivió tantos años, explica el Embajador mexicano.

Esto implica que la gente que viniera, que sería el caso de algún vicepresidente, presidente, canciller, lo harían en carácter prácticamente personal, de tal manera que la representación oficial la tendrían en este caso los Embajadores de países acreditados.