
Por la sospecha de que su hijo de 5 años había contraído coronavirus, el futbolista turco Cevher Toktas fue arrestado por la policía, acusado de haber matado a su vástago al asfixiarlo con una almohada, mientras el niño se encontraba hospitalizado bajo observación por COVID-19.
El canal de televisión HaberTurk reportó que Toktas, de 32 años que actualmente juega para el equipo amateur Bursa Yildirimspor, y pasó por el Hacettepe, equipo que participó una temporada en la Primera División del futbol turco, confesó su crimen a la policía diez días después del hecho.
El pequeño Kasim de 5 años, había sido internado en el hospital pediátrico de Bursa, una ciudad al noroccidente de Turquía con tos y fiebre desde el 23 de abril, por lo que fue colocado en cuarentena por sospecha de coronavirus, junto al futbolista.
Sin embargo, el pasado 4 de mayo Toktas asfixió al niño con una almohada y pidió ayuda al argumentar que la condición de su hijo había empeorado y aunque el infante fue trasladado a terapia intensiva, murió dos horas después, pese a dar negativo en la prueba de COVID-19.
El jugador diez días después se arrepintió y confesó a la policía que había asesinado a Karim, ya que no lo quería, por lo que los restos del niño fueron exhumados para que se le practique una autopsia que determine las causas de su muerte, por lo que se iniciará un juicio contra Toktas en próximas fechas.
havh
Copyright © 2020 La Crónica de Hoy .