Opinión

La carta de los Chapitos

Hay que partir del hecho de que la crisis del fentanilo está en el centro de la contienda electoral en Estados Unidos. Demócratas y republicanos tratan a toda costa de colgarse una medalla.

Poco o nada hacen con respecto a su propia industria farmacéutica, sus adictos o sus traficantes locales. Ven hacia afuera. Ya tienen en la mira a China y México.

La DEA eligió, por su relevancia mediática, a los Chapitos. Son los villanos ideales. Ya hasta le pusieron precio a la cabeza de Iván Archivaldo. Los hijos del Chapo resintieron la presión y se juntaron para enviar una carta a la opinión pública para tratar de bajarle tres rayitas al asedio.

Dicen que no están en el negocio del fentanilo, que ni siquiera son los jefes del Cartel de Sinaloa y que son víctimas de su propia fama. Lo curioso es que ellos mismos promovieron esa celebridad con sus autos, fiestas y crueles excesos.

Va un ejemplo. No se olvida la tarde en que los Chapitos amagaron con matar a los familiares de los soldados que atraparon a Ovidio. Su amenaza dobló al gobierno y los soldados dejaron ir al Ratón. Fue un alarde de soberbia. Ahora pasan de la altanería a la humildad.

Ovidio Guzmán ya pasó su primera noche en el penal del Altiplano

Ovidio Guzmán ya pasó su primera noche en el penal del Altiplano

Cuartoscuro

No somos nada

No ha sido fácil seguirles la pista a los posicionamientos del senador Ricardo Monreal con respecto a sus aspiraciones para el 2024. El cambio es la regla. Ha pasado de bordear el rompimiento con la 4T hasta decir, en todo dramático, “prefiero ser nada” antes de traicionar a López Obrador.

¿Dónde andará la semana que entra? Acaso el cambio obedezca a que tiene información nueva que los demás desconocen.

Después de más de dos años de no tener contacto, ni siquiera telefónico, con el presidente, el senador se mostró dispuesto a levantarle la mano a quien gane las encuestas de Morena, mecanismo de elección con el que nunca estuvo de acuerdo.

Nadie pone en duda la destreza política del zacatecano, pero la verdad es que más le vale tener el socorro del Santo Niño de Atocha, porque se le puede hacer realidad eso de no ser nada.

Pasarela de corcholatas

Según las encuestas más recientes, el empresario Guadiana, candidato de Morena, está a 20 puntos de distancia del puntero Manolo Jiménez en la campaña para gobernador de Coahuila.

¿En un mes podrá alcanzar y ganar? Es una misión imposible. Hace unos días Guadiana prometió, por su sombrero, que al parecer es algo sagrado para él, que si gana la elección conseguirá que el cantante Peso Pluma actúe en Coahuila.

Como la propuesta fue recibida con frialdad el candidato de Morena anunció que en las cuatro semanas que faltan para la elección irán a Coahuila las cuatro corcholatas presidenciales de Morena. Será una pasarela.

Las corcholatas suelen recibir aplausos y vítores en auditorios controlados; o sea, locales llenos con simpatizantes de Morena, pero Adán Augusto López ya probó en carne propia lo que significa una audiencia sin militancia.

Ya se verá si las corcholatas atraen votos o los ahuyentan.

Va derecho y no se quita

La SCJN no está para enderezar entuertos y cumplir caprichos, de manera de bateó la demanda del gobierno de dejar para después el análisis del llamado Plan B de la Reforma Electoral.

El gobierno, adelantando un revés, quiere que el tema se toque después de las elecciones del Edomex y Coahuila para no hacerle más ruido del que ya tienen a sus candidatos. Pero los ministros dijeron que no y el lunes le entran al tema.

Lee también