Opinión

Larga vida

No sabemos los planes que Dios tiene para cada uno de nosotros, pero fuera de la cantidad de peligros existentes que nos rodean, podemos incidir en nuestro bienestar ayudando a nuestro cuerpo y mente a funcionar de la mejor manera. Ello implica ejercitarnos para mantenernos elásticos, fuertes y activos. En el aspecto mental, seguir siempre aprendiendo cosas nuevas a fin de mantener nuestras neuronas trabajando en óptimas condiciones. Se dice: mente sana en cuerpo sano.

Haciendo ejercicio

Haciendo ejercicio

Es bien sabido que quienes se mantienen en actividad pueden llegar a vivir más tiempo que las personas que son totalmente pasivas y sedentarias, porque estas últimas son víctimas más tempranas de diferentes padecimientos. En definitiva, tener una vida más activa prolonga la vida, siempre y cuando estemos exentos de algún padecimiento genético imposible de revertir.

Así que, cuando puedas caminar en lugar de subirte al coche, hazlo.

Ayuda el abrigar pensamientos buenos y optimistas. Y, sobretodo, vivir con alegría, ya que el cuerpo segrega endorfinas que son el ingrediente de la felicidad y esto mantiene el cuerpo joven. La felicidad definitivamente sustenta la salud de mente y cuerpo. Así que ve tras ella a pesar de lo que digan los demás.

Vivamos intensamente cada día. Esto implica correr algunos riesgos, que no deben ser excesivos, como romper rutinas, ver y aprender cosas nuevas, ya que esto es una de las formas para mantener joven el cerebro. Enfrentarnos a nuevos retos hace que sigamos siendo creativos. No temamos a los cambios pues casi siempre son para bien. Cuando deseemos efectuar un cambio en cualquier sentido en nuestra vida, hay que actuar, pues la acción desata los cambios.

Lee también

Para tener una vida larga y plena, tratemos de comer razonando que nos hace bien y que nos hace mal, algo que la mayoría sabemos de forma intuitiva. Se dice que somos lo que comemos y lo que pensamos. Atención: son los excesos de cualquier cosa lo que nos acaba dañando. Yo creo que la comida no alarga la vida, pero la alegría sí que lo hace. Reír es importantísimo en la vida o cuando menos sonreír. Cantar, bailar o escuchar música alegra el alma ,que es el motor anímico que sostiene al cuerpo.

Es importante compartir nuestro tiempo con las personas que consideramos de valía porque eso nos impulsa a ser mejores, hagámoslo con disposición positiva pensando que nuestros días transcurrirán con salud y alegría.

Mantengámonos ocupados en tareas diferentes, pero procurando espacios de tiempo para relajarnos con actividades placenteras que nos distraigan, pues la mente también necesita descanso.

Insisto, movámonos siempre. No hemos venido a este mundo a estar sentados, inactivos y no hacer nada. Sino a realizar obras importantes, y ello requiere perseguirlas moviéndose.

Y lo más importante, no nos preocupemos demasiado. No seamos tan aprehensivos y exigentes con nosotros mismos. Hay que hacer las cosas bien pero con calma. No permitamos que nadie nos abrume con sus exigencias. Las actividades deben realizarse una por una.

Por último fomentemos nuestra sensibilidad, no permitamos que nuestro corazón se endurezca con el tiempo. Amemos y sigamos amando sin importar lo que pase en la vida.

Mail: corzoalma17@yahoo.com.mx