Escenario

El cantautor mexicano presenta su nuevo sencillo Siente el fuego, un tema visceral y lleno de instinto que abre paso a su próxima producción discográfica. En entrevista, Benny Ibarra comparte detalles sobre la creación, su gira y su constante reinvención artística

Benny Ibarra en entrevista: “Siente el fuego” y la reinvención de un artista que trasciende generaciones

Benny Ibarra (Alan Mino)

Benny Ibarra no se detiene. Tras el lanzamiento de Nacer una vez más, un tema introspectivo y espiritual, ahora presenta Siente el fuego, su segundo sencillo, que explora el lado más instintivo y visceral de la existencia. “Mientras la primera canción tiene un tono de introspección, esta nueva pieza celebra lo animal, lo inmediato, esa reacción química inevitable entre dos personas”, explica el músico.

El contraste entre ambas canciones es, para él, fundamental. Con ello abre la puerta a un disco que no se conforma con un solo tono, sino que busca trazar un arco emocional, creativo y humano. “El tercero no tiene nada que ver con estas dos, me gusta que la gente entienda que en este álbum hay un abanico amplio de emociones, desde la espiritualidad hasta la parte más terrenal”, comenta.

La colaboración con Paco Huidobro resultó clave para dar vida a este proyecto. “A mí Paco me invitó a hacer cosas que yo solo no hago, y yo lo llevé a terrenos fuera de su zona común como productor. Lo único que nos importaba era conmover: él a través de los sonidos, yo con las voces. Esa mezcla nos dio libertad creativa”, explica Ibarra. El resultado fue un proceso híbrido, entre sesiones en casa, grabaciones individuales y decisiones compartidas a distancia, pero siempre con un eje común: la búsqueda de conmover al oyente.

El músico recuerda que la frase “Siente el fuego” fue lo primero que surgió, casi como un destello intuitivo, y a partir de ahí se construyó todo el tema. “Hay canciones que se escriben desde la cabeza, otras desde el corazón, y otras desde el cuerpo. Esta es del cuerpo, es visceral, se siente de la cintura para abajo, con una energía claramente sexual y celebratoria”, dice con una sonrisa.

El proceso creativo y la vulnerabilidad del escenario

El nuevo material de Benny Ibarra nació en medio de una agenda intensa, con proyectos teatrales, musicales y colaboraciones que lo mantuvieron en constante movimiento. “La presión también me inspira. Muchas veces me encontraba escribiendo letras mientras estaba en medio de montajes como Vaselina o con los 90’s. Esa mezcla de influencias terminó filtrándose en el disco”, confiesa.

Más allá de la composición, lo que distingue a este nuevo trabajo es el cuidado en cada detalle de producción. El propio Ibarra señala que el disco fue creciendo solo, indicándoles qué estaba bien y qué no, un proceso que culminó con la mezcla de César Sogbe, otro colaborador fundamental en el resultado final.

De cara a la gira Nacer una vez más, que lo llevará a escenarios como el Teatro Diana y el Metropólitan, Ibarra promete una experiencia íntima y renovada. “No quiero que sea solo un concierto, sino un espectáculo donde la gente viva vulnerabilidad, frescura y cercanía. Claro que hay profesionalismo detrás, pero también una etapa de adaptación que el público va a presenciar en vivo, y eso lo hace especial”.

La emoción se multiplica porque será la primera vez que se presente como solista en el Metropólitan. “Traigo muchas ganas, es un escenario que respeto muchísimo y en el que quiero volar con estas canciones nuevas, junto a clásicos que me han acompañado por más de tres décadas”.

El músico no es ajeno a la disciplina teatral. Haber trabajado en obras como Jesucristo Superestrella y Vaselina lo formó en otras dinámicas escénicas. “El teatro es el laboratorio, el lugar donde se prueba y se fracasa; el concierto es el recreo, la celebración. En ambos espacios aprendes a leer la energía del público, y eso te transforma como intérprete”.

Reinventarse sin perder la esencia

Con más de treinta años de carrera, Benny Ibarra sigue sorprendiendo a públicos de distintas generaciones. Para él, la clave está en la búsqueda constante. “Siempre he querido que mis canciones inviten a reflexionar, a profundizar y a sorprenderse. No me interesa repetirme, sino proponer”, afirma.

Ese espíritu también lo impulsa a proyectar nuevos horizontes. El músico admite que no tiene un plan fijo, que la incertidumbre le resulta creativa. “Lo más divertido es que nunca sé qué va a pasar. Hay posibilidades de volver con Timbiriche, me han ofrecido proyectos de teatro y cine, pero por ahora quiero enfocarme en este disco y en la gira. Eso será la base para un nuevo salto, quizá hacia otros países, con colaboraciones que me ilusionen y que me reten”.

La disciplina, sin embargo, se mantiene como un eje constante. “Lo que no voy a permitir es que pasen otros 15 años sin un disco de solista. Este álbum es una declaración de vida, una manera de decir que sigo aquí, explorando y buscando nuevas formas de conmover”.

Al cerrar la conversación, Benny Ibarra deja claro que su música sigue siendo un puente entre generaciones, una forma de conectar el instinto con la reflexión, la cabeza con el corazón y el cuerpo. Siente el fuego es apenas el inicio de un viaje sonoro que promete encender emociones en cada escenario.

Tendencias