
El Gobierno Municipal de Naucalpan, a través del Organismo de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (OAPAS), aseguró que la distribución de agua en el municipio se realiza con pleno sustento legal, técnico y bajo estrictos mecanismos de supervisión, con el fin de garantizar el derecho de la ciudadanía al acceso al vita líquido.
Ante señalamientos recientes sobre el suministro de agua mediante unidades móviles, el organismo detalló los procesos y regulaciones que respaldan la operación, con el objetivo de despejar dudas y reforzar la confianza ciudadana.
Autorización formal y estudios técnicos
El Consejo Directivo de OAPAS aprobó el pasado 8 de agosto la distribución de agua proveniente de los pozos 207 San Andrés Atoto, 205 Alce Blanco y 210 Américas. Esta determinación se sustentó en estudios hídricos que confirmaron que no existe sobreexplotación en dichas fuentes, en concordancia con los títulos de concesión otorgados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua). De esta manera, se garantiza que el aprovechamiento de los recursos hídricos se mantenga dentro de los márgenes de sostenibilidad establecidos a nivel federal.
De manera posterior, se solicitó a la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) la evaluación de impacto para asegurar que el proceso se realice conforme a la normativa vigente. Cada permisionario deberá renovar sus autorizaciones bajo un balance hídrico validado y sólo se permitirá un número específico de unidades de distribución, bajo control institucional. Esta medida busca evitar abusos y asegurar que cada litro de agua distribuido esté registrado y justificado.
Un suministro ante el déficit del Cuatzamala
El organismo municipal aclaró que la distribución de agua en pipas no corresponde a un esquema de lucro, sino a una necesidad operativa frente al desabasto que enfrenta la demarcación. Recordó que desde 2023 se mantienen los recortes al Sistema Cuatzamala, lo que ha derivado en un déficit aproximado de 600 litros por segundo en el suministro destinado a Naucalpan.
Frente a esta situación, el uso de unidades de distribución se ha convertido en una alternativa indispensable para garantizar que la población reciba el vital líquido en sus hogares, principalmente en las zonas más afectadas por la disminución del caudal.
El Gobierno Municipal enfatizó que la distribución se encuentra regulada, supervisada y apegada a lineamientos legales. Asimismo, advirtió que cualquier irregularidad en el servicio será sancionada. La prioridad, subrayó, es garantizar que las familias naucalpenses cuenten con acceso seguro y justo al agua, en condiciones de transparencia.
Finalmente, la administración municipal reiteró que su compromiso es trabajar de manera coordinada con autoridades estatales y federales, para enfrentar el reto del desabasto de agua con soluciones responsables y apegadas a derecho.