
La bancada de Movimiento Ciudadano, en el Congreso local, presentó una iniciativa para otorgar derechos a los artistas callejeros y garantizar la libre expresión en sitios como parques y plazas públicas.
La legisladora Patricia Urriza Arellano, con el fin de evitar que quienes realizan algún espectáculo o actividad artística en un lugar público sea intimidado, amonestado o detenido por las autoridades de las alcaldías o policiales.
Urriza sostuvo que este tipo de actividades son parte de la identidad de la Ciudad de México además de ser una tarea cuya percepción económica depende de la posibilidad de poder mostrar en jardines o plazoletas actividades circenses, musicales, artesanales, pinturas, fotografías, caricaturas, teatrales, cuenta cuentos, entre otros.
Cerca del 40 por ciento de los artistas que hacen uso del espacio público en la ciudad ganan menos de 10 mil pesos mensuales, lo que los coloca como un sector en situación económica precaria, en la que dependen de la tolerancia de las autoridades locales y, en ocasiones, de decisiones discrecionales de policías o funcionarios de las alcaldías.
“Recientemente se ha documentado el hostigamiento de las autoridades y que genera una mala percepción de la comunidad con ellos, al hacer mal uso del espacio público y que se perciban incluso como una ‘molestia’, cuando tienen un valor cultural comunitario. Esta situación genera un ambiente de precariedad y marginalización que afecta directamente su posibilidad de ejercer su arte en espacios públicos”, señaló.
Acompañada de artistas del espacio público, quienes expresaron su preocupación y saludaron la iniciativa, la diputada comentó que su iniciativa busca reformar diversas disposiciones en la ley; y señaló que anteriormente no se habían impulsado iniciativas con modificaciones a la ley para realizar su labor en libertad.
La medida legislativa también considera que se fomenten desde el Gobierno local y alcaldías dichas actividades, así como el apoyar trámites para gestionar sus presentaciones periódicas en foros y agilizar los trámites para expedir permisos y autorizaciones.
Artistas dependen económicamente de lo que les da la gente
Guadalupe Ocampo, juglar del Jardín Hidalgo, dio a conocer que los artistas urbanos se encuentran en indefensión porque dicho oficio depende de lo que amablemente les da la gente, “el día que trabajamos, comemos, el que no, pues no. Entonces nosotros no pedimos nada extra, pero si que nos dejen trabajar libremente llevando alegría y sonrisas a la gente”.
Selenia del colectivo acrobático La Carpa Morada, definió su labor en las calles como un sueño posible, ya que poder salir a cruceros o parques a ejecutar sus rutinas y números acrobáticos sin ser cuestionada o molestada por ello es una interrogante y llamó al Gobierno local a brindar facilidades para desarrollar sus actividades,
“Cada mes hacemos nuestro espectáculo en diversas partes de la ciudad y pedir permisos para ello es muy difícil, por eso nos allegamos a tomar estos espacios públicos, que ya han sido limitados”.
De igual manera, el fotógrafo Ricardo Martínez destacó que las jornadas de los artistas del espacio público son de más de 8 horas, cuando los dejan laborar, donde “sin garantías de nada su intención es llevar alegría, esperanza, sonrisas a miles de personas, a veces desde las 9 y hasta las 1 de la mañana del día siguiente”.
La iniciativa fue elaborada en coordinación con el Consejo Consultivo Pensando en México capítulo CDMX, cuya presidenta, Sofía Margarita Provencio, sostuvo que tal iniciativa es un pilar imprescindible para hablar de la democratización del espacio público, “ya que las expresiones artísticas que llevan a la gente no se dan en teatros o espacios cerrados, sino durante siglos se ha hecho a través de las calles”.