
Donald Trump disparó este miércoles la incertidumbre sobre una posible entrada de Estados Unidos en la guerra de Israel contra Irán, tras dejar escrito, en tono de burla, el siguiente mensaje: “Puede que sí, puede que no. Quiero decir, nadie sabe lo que voy a hacer”.
El presidente de EU abandonó abruptamente el lunes la cumbre del G7 en Canadá para regresar a la Casa Blanca y reunirse con su Consejo de Seguridad Nacional, con el fin de evaluar si Estados Unidos se suma a los ataques que Israel lleva a cabo desde el viernes contra Irán.
“Puedo decir esto: Irán tiene muchos problemas y quiere negociar (su programa nuclear). ¿Por qué no negociaron conmigo hace dos semanas? Podrían haberlo hecho bien. Habrían tenido un país. Es muy triste ver esto”, agregó.
El presidente explicó que dio a la República Islámica un plazo de 60 días para negociar un acuerdo nuclear y que, en el día 61, Israel inició bombardeos contra instalaciones de enriquecimiento de uranio en territorio iraní.
Trump también se refirió al mensaje que publicó el martes en redes sociales, dirigido a Teherán, en el que escribió “rendición incondicional”. Según dijo, con esa frase se refería a que Irán llegue al punto de decir: “Ya no aguanto más, me rindo”.
“Durante 40 años han dicho ‘Muerte a Estados Unidos’, ‘Muerte a Israel’, ‘Muerte a cualquiera que no les gustara’. Han sido unos matones de patio de colegio. Ahora ya no lo son, pero veremos qué pasa”, expresó.
Por su parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, tampoco confirmó o desmintió la posibilidad de un inminente bombardeo de su país a Irán, durante una audiencia en el Senado en la que evitó contestar directamente sobre si el presidente, Donald Trump, le ha solicitado planes para la entrada en el conflicto entre Israel y Teherán.
“Si hubiera solicitado o no (los planes), no lo revelaría en este foro”, dijo el líder del Pentágono ante el Comité de las Fuerzas Armadas de la Cámara Alta del Congreso.