
“Exhortamos a todas las instituciones del Estado estadounidense a cesar de inmediato las campañas de odio, estigmatización y persecución contra los ciudadanos y ciudadanas venezolanas en ese país”, comentó el gobierno de Nicolás Maduro en un comunicado.
La exigencia del mandatario venezolano fue también la de respetar los derechos humanos de los migrantes oriundos de Venezuela que se encuentran en Estados Unidos, pues con “esfuerzo y dignidad, aportan diariamente a la construcción” de la sociedad norteamericana.
Asimismo, Maduro exhortó a abatir “las prácticas de separación familiar y que se garantice el derecho de los migrantes a regresar voluntariamente y de forma ordenada a su patria, si así lo desean”; además, apeló a que aquel país “pueda reencontrarse con esos valores originales y logre avanzar hacia un horizonte de paz, bienestar compartido, respeto por la vida y contribución positiva al equilibrio del mundo”, aseveró así el presidente de Venezuela.
Estas palabras hacen eco del interés que ya había expresado anteriormente el dirigente venezolano de recuperar las relaciones bilaterales que se habían roto desde el 2019 entre Estados Unidos y Venezuela, convocando a mantener la posibilidad de que se abran los canales diplomáticos con el país norteamericano.