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Todd Lyons informó a sus oficiales que los indocumentados detenidos en el interior del país deberían permanecer encarcelados “mientras dure su proceso de deportación”

EU ordena no entregar fianzas a migrantes detenidos por ICE que piden su deportación

La administración de Donald Trump ordenó eliminar las audiencias de fianza para todos los indocumentados detenidos, lo que podría dejarlos por meses y hasta años en centros de detención mientras los inmigrantes luchan contra la deportación, según un memorando citado por The Washington Post.

En una directiva emitida el pasado 8 de julio, el director interino del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), Todd Lyons, informó a sus oficiales que los indocumentados detenidos en el interior de Estados Unidos deberían permanecer encarcelados “mientras dure su proceso de deportación”.

En la actualidad, solo los migrantes capturados tras pasar la frontera son detenidos sin derecho a fianza. Desde que Trump llegó al poder nuevamente, solo a nueve extranjeros que cruzaron de forma indocumentada se les ha permitido luchar por sus casos en libertad condicional.

En el documento, Lyons dijo que los departamentos de Seguridad Nacional (DHS) y Justicia (DOJ) habían “revisado su postura legal” sobre la política de detención y liberación de inmigrantes y habían determinado que los indocumentados, sin importar donde hubieran sido detenidos o cuánto tiempo llevaran viviendo en el país, “no podían ser liberados de la custodia de ICE”.

Asimismo, ICE no dejará la decisión de otorgar la libertad bajo fianza en un juez sino en un oficial de inmigración.

El director expuso que, seguramente, la nueva directriz será retada en los tribunales.

Fernando Romo, abogado de inmigración y asesor de la Asociación de Salvadoreños en Los Ángeles (Asosal), mencionó que ha visto un aumento en las denegaciones de fianzas emitidas por los jueces y que al dejar esta discreción en los agentes de ICE “será prácticamente imposible” que dejen a los inmigrantes pelear su caso en libertad.

A esto se suma que el atasco en los tribunales de inmigración, con cerca de 3.5 millones de casos pendientes, representa un reto para los inmigrantes, que podrían esperar meses o hasta años para poder ver a un juez.

“Lo que busca el Gobierno es desalentar a los inmigrantes a presentar sus casos, especialmente aquellos que llevan años y deberían tener su oportunidad en corte, quieren que acepten la deportación rápida”, comentó Romo.

Por su parte, Aaron Reichlin-Melnick, abogado experto en migración en el American Immigration Council, apuntó contra la nueva directriz y precisó que, a pesar de que el presidente estadounidense y el Partido Republicano criticaron la interpretación de la Administración del expresidente Joe Biden sobre la política de detención y liberación de inmigrantes, “ahora Trump está haciendo lo mismo”.

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