
La corrupción no es en absoluto una prioridad para el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, si quien la comete es de su entorno un republicano de confianza. Es el caso del zar de la frontera Tom Homan, quien al parecer es tan rápido en ordenar deportaciones de familias de inmigrantes como en recibir una bolsa de dólares en sobornos.
Así lo reveló este domingo el diario “The Washington Post”, que informó sobre un video del FBI aceptando una bolsa con 50,000 dólares en efectivo de manos de agentes encubiertos del FBI en Texas en septiembre de 2024, poco antes de las elecciones presidenciales en EU.
En ese momento, Homan, que fue director del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en el primer mandato de Trump, no era funcionario y era candidato a ocupar un alto cargo en materia de inmigración en el caso de que el republicano ganara las elecciones, como finalmente sucedió.
Según dos fuentes cercanas al caso y un documento perteneciente a la investigación citados por el diario, Homan presuntamente aceptó el dinero de los agentes, que se hicieron pasar por empresarios que le ofrecieron el monto a cambio de que les ayudara a obtener contratos relacionados con el endurecimiento de las leyes de inmigración, algo que Trump ya había dicho que haría, detalla el diario.
El Washington Post asegura que el Departamento de Justicia inició una investigación por soborno contra Homan en los últimos meses de la Administración de Joe Biden, pero Trump cerró el caso este año, alegando falta de pruebas creíbles y calificándola de “investigación política”.
Homan ha encabezado junto con la actual secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, la cruzada contra la inmigración ilegal que ha marcado el retorno al poder de Donald Trump, que en sus ocho meses de mandato ha deportado a más de 200,000 personas, según datos gubernamentales.