
El temor a que Israel no cumpla el “acuerdo de paz” de Donald Trump, como ha ocurrido en las anteriores ocasiones que se logró un alto el fuego se hizo evidente este martes, con el asesinato de seis palestinos a manos de soldados israelíes cuando aún no habían pasado ni 24 horas desde los fastos de la firma del acuerdo entre Israel y Hamás en el balneario egipcion de Sharm el Sheij, a la mayor gloria de su autor, Donald Trump.
El Ejército israelí mató este martes a seis personas en tres incidentes diferentes en la ciudad de Gaza (norte) y en Jan Yunis (sur) cuando se encontraban en zonas cercanas a la llamada “línea amarilla” de retirada de las tropas israelíes del alto el fuego acordado, un límite confuso para la población. No se ha explicado por dónde discurre exactamente dicha línea y los medios solo han tenido acceso a un mapa muy poco detallado con las líneas de retirada que no hace posible saber sus límites.
En un comunicado, el Ejército israelí dijo que detectó a varias personas “cruzando la línea amarilla y acercándose a las tropas” en el norte de Gaza, lo que calificó como “una violación del acuerdo”.
“Se intentó distanciar a los sospechosos, pero estos no obedecieron y continuaron acercándose a las tropas, que abrieron fuego para eliminar la amenaza”, añade la nota.
38 cadáveres recuperados
El Ministerio de Sanidad de Gaza anunció que el lunes se recuperaron 38 cadáveres de los escombros, en el cuarto día desde la entrada en vigor el viernes pasado del alto el fuego entre Israel y Hamás.
El número total de fallecidos por la ofensiva bélica israelí desde octubre de 2023 asciende a 67,913 muertos y 170,134 heridos, según este ministerio, dependiente de Hamás. Se teme que la cifra de fallecidos se duplique a medida que sean removidos los escombros tras dos años de bombardeos.
Llamado de Unicef a Israel
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) pidió este martes al gobierno de Benjamín que abra todos los puntos de entrada de ayuda humanitaria hacia la Franja de Gaza y agilice los procedimientos de autorización para su ingreso.
“El alto el fuego no resuelve todos los problemas de los niños en Gaza”, dijo el representante de UNICEF en Palestina, Jonathan Crickx, quien insistió en la necesidad de permitir la entrada de suministros esenciales.
“Todos nuestros equipos están listos y trabajando, entregando tiendas de campaña, ropa de cama, colchones y alimentos. Tenemos 1,300 camiones preparados para entrar a Gaza, además de material para seis tuberías de agua, medicamentos, equipamiento médico y vacunas”, explicó, al tiempo que recalcó la urgencia de acelerar los permisos y los controles de los camiones.
El representante señaló que, por el momento, el único punto abierto para la entrada de ayuda humanitaria es el paso de Kerem Shalom, por donde el domingo lograron acceder 45 camiones de UNICEF.
Sin embargo, recordó que el cruce permanece cerrado desde la tarde del lunes y durante todo el martes debido al feriado religioso en Israel.
Para el responsable de UNICEF, es además necesario un proceso más rápido por parte de Israel para conseguir las autorizaciones de entrada y para la inspección de los camiones que ingresan en Gaza.
Crickx recordó que el nivel de destrucción en la Franja es muy alto: “Más del 80% de las viviendas han sido dañadas o destruidas, numerosos hospitales no funcionan y los problemas de desnutrición persisten ya que los alimentos llegan lentamente”.
“Necesitamos que todos los puntos de entrada a Gaza estén abiertos”, reiteró, alertando que el trabajo humanitario se complica ante la llegada del invierno, que podría favorecer la propagación de enfermedades.
“El alto el fuego en sí mismo no resuelve todos los problemas mentales de los niños”, apuntó Crickx, que recordó que en Gaza hay un millón de niños que, eso sí, no están ya expuestos “a los bombardeos que escuchaban y que los asustaban”.