
La Arquidiócesis Primada de México hizo un urgente llamado a la sociedad en su conjunto a trabajar unida por la paz y la reducción de la violencia.
Lo anterior, ante los lamentables hechos ocurridos la mañana de este martes en un inmueble ubicado junto a la Parroquia de San Jorge Mártir, en la Alcaldía Gustavo A. Madero, en donde un hombre armado sometió con un arma de fuego al encargado de un gimnasio ubicado al interior del Centro Comunitario Leonardo Murialdo, de la iglesia mencionada.
Ante la situación de inseguridad que se vivió, la jerarquía católica externó su profundo pesar porque “espacios destinados a la vida comunitaria y al encuentro fraterno se vean amenazados por la violencia, que no solo daña a las víctimas directas, sino que fractura el tejido social, especialmente en las comunidades más vulnerables.
Como Iglesia que peregrina en la Ciudad de México, reiteramos con firmeza nuestro llamado a promover una cultura de paz, en la que todas y todos asumamos la responsabilidad de construir condiciones más justas y humanas para convivir.
La jerarquía católica resaltó que, con base en información oficial disponible hasta el mediodía de este martes, se trató del secuestro de personas y el posterior enfrentamiento armado, que se registró al interior de uno de los espacios donde la parroquia —administrada pastoralmente por la comunidad de los Josefinos de San Leonardo Murialdo— realiza parte de su misión evangelizadora y social.
La Arquidiócesis externó su agradecimiento ante la oportuna intervención de las autoridades civiles y de seguridad, debido a que, en el momento de los hechos, se celebraba misa de las 8 de la mañana en el referido templo y tanto los sacerdotes como los fieles estuvieron a salvo en todo momento.
En este contexto, se recordó que desde hace un par de años, como Arquidiócesis se ha impulsado la iniciativa Diálogos por la Paz en diversas alcaldías de la ciudad, se han creado Centros de Escucha, acompañado a víctimas de violencia y colaborado con organizaciones civiles y autoridades para abrir caminos de reconciliación, desarrollo humano y reinserción social.
la Iglesia Católica aprovechó la oportunidad, para reiterar un llamado a que la sociedad se sume a la campaña de Canje de Armas, enfocada a reducir riesgos y fomentar ambientes más seguros, lo cual se puede hacer en los atrios de varios templos como espacios de colaboración con la iniciativa en favor del desarme y la paz social.