
En el negocio ilegal del tráfico de hidrocarburos, México no es el único con organizaciones que se dedican a transportar y vender esta mercancía aplicando tácticas para evadir el pago correspondiente de impuestos. Desde Utah, Estados Unidos, la familia Jensen fueron identificados por el FBI como una red de contrabando, lo conocemos en México como huachicol, que transportaron 2 mil 881 cargamentos de petróleo crudo proveniente de México.
Según las investigaciones del FBI, los Jensen generaron ganancias hasta por 300 millones de dólares, gracias al negocio de huachicol que pudieron mantener bajo el nombre de la empresa Arroyo Terminals, ya que además, contaron con la ayuda del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG): el cártel mexicano le robaba el combustible a Pemex, y era comercializado a la familia.
James Lael Jensen, Kelly Anne Jensen y sus hijos Maxwell Jensen y Zachary Jensen se encargaban de introducir enormes cantidades de petróleo a través de las aduanas haciéndolo pasar por lubricantes y destilados, falsificando o maquillando documentos, blanqueando dinero y generando declaraciones falsas.
¿Siguen operando los Jensen?
En abril de este año el negocio fue desmantelado por el FBI cuando James y Kelly Anne fueron capturados, de ser encontrados culpables podrían enfrentar hasta 20 años de prisión y una multa de dos millones de dólares.
Ahora, las autoridades estadounidenses, buscan confiscar las propiedades de los Jensen que equiparen el monto que generaron en ganancias por su negocio de tráfico ilegal de combustible.