
El año que comienza mañana no será fácil para los mexicanos ni mucho menos para Morena. En el plano general, en 2026 se vivirán eventos o circunstancias que colocarán al país en una situación delicada. El Mundial de fútbol, las presiones desde Estados Unidos, el estancamiento económico, la inseguridad que no cede, entre otras, son situaciones que inevitablemente enfrentaremos. Por lo que hace a Morena, en los próximos meses vendrán sacudidas fuertes que profundizarán divisiones que ya se miran en la arena pública. Algunas de estas están relacionadas con los tiempos electorales, al estar en vísperas de la nominación de candidaturas a diputaciones, alcaldías y gubernaturas, mientras que otras están relacionadas con reacomodos al interior de sus grupos de poder.
En este contexto, 2026 es un año clave para la oposición si quiere construir una alternativa hacia 2030. Si bien algunos eventos que de manera natural servirán a la oposición, lo más trascendente requiere de la toma de conciencia y acción por parte de actores, partidos y sectores que desean enfrentar a Morena en 2030 con una candidatura viable y expectativa real de triunfo. Lo que este año se construya o se deje para después por no considerarlo relevante, será decisivo para la próxima elección presidencial. Algunas de las claves que se deben de considerar y que resultarán decisivas son las que a continuación enuncio.
Claridad objetiva sobre la realidad de México y de su sociedad. México no es un país de pobre y ricos, sino uno con pobreza, riqueza mal distribuida, falta de empleos bien remunerados, corrupción rampante, muchos problemas y muchas oportunidades. México no es un país de chairos y fifís, sino uno en el que la ideología política abarca todos los espacios del espectro político y en el que una buena parte de la población identifica al Estado como el responsable, para bien y para mal, de lo que pase. México no es un país de malos y buenos, dependiendo de qué tan similar a mi piensen los demás en asuntos como la política, la religión, la economía o los derechos y libertades. Pretender encasillar a México como un país de “blanco y negro” es no reconocer que el nuestro es un país mosaico en el que las diversidades de toda índole lo caracterizan.
Definición de un proyecto de país que abarque a todos los sectores. Hoy que el libertarismo parece avanzar en América Latina y otras regiones del mundo y justo cuando en México se empieza a hablar de ello como una alternativa a lo que muchos identifican como el populismo de Morena, cualquier opción opositora, sea libertaria o no, debe de considerar que en 2030 será preciso proponer un proyecto de país que abarque no solo los intereses de quienes lo encabecen y en el que todos los sectores sociales se vean representados. Un error de enorme relevancia que se podría cometer es creer que basta con proponer lo contrario a lo que ha hecho Morena y confrontar a un segmento mayoritario de la población en asuntos como la política social, bien sea a través de los apoyos económicos, los servicios de salud o la educación pública. Hablar de economía, crecimiento, riqueza y empleo no bastará para convencer a los que se necesitan para ganar.
Identificación de un liderazgo competitivo y creación de una estructura territorial. La definición de la persona que habrá de enfrentar a Morena es de enorme relevancia. El carisma, la capacidad discursiva, la hoja de vida, la cercanía con la gente, entre otras, son características que se tienen que considerar aun por encima de las eventuales alianzas que se puedan formar. Lo mismo sucede con la estructura territorial que no puede confiar, como suele hacerse, a aquellas que cada elección orbitan a los partidos a cambio de un pago o de promesas pocas veces cumplidas. Si bien las estructuras tradicionales serán útiles y no se les puede despreciar, quienes encabecen una candidatura opositora deben de involucrar a la mayor cantidad posible de personas y promover una participación ciudadana mucho más activa y comprometida que lo que hasta ahora hemos visto.
Si la oposición quiere ser opción en 2030, el año que comienza debe de ser el punto de arranque para identificar, asumir y construir mucho de lo que después ser imprescindible. La pelota está en la cancha de quienes quieren buscar una alternativa para lo que hasta ahora ha sido Morena. Mucho pronto sabremos si deciden asumir el reto.
Profesor y titular de la DGACO, UNAM
Twitter: @JoaquinNarro
Correo electrónico: joaquin.narro@gmail.com