
En el marco del Día Mundial del Árbol, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, encabezó la declaratoria de 12 árboles como Patrimonio Natural de la Ciudad de México. Entre ellos destaca un ahuehuete de aproximadamente 700 años de antigüedad, ubicado en el atrio de la parroquia de Santa Catarina Mártir, en la alcaldía Azcapotzalco.
“El ahuehuete tiene la misma cantidad de años que la ciudad de Tenochtitlan. Aquí en Azcapotzalco hay una historia muy importante, hay pueblos originarios, hay barrios, y también hay árboles que debemos conmemorar”, expresó Brugada ante vecinas y vecinos del pueblo de Santa Catarina.
En el acto, la mandataria capitalina subrayó que los árboles son esenciales para la vida en las ciudades. “Nos dan oxígeno, sombra y son testigos de la historia. No son ornamento ni lujo: los árboles son vida”, afirmó.
Durante su intervención, Brugada anunció un plan estratégico de protección y conservación del arbolado urbano, que comenzará con un censo diagnóstico para conocer el estado físico de los árboles de la ciudad, identificar cuáles requieren mantenimiento y cuáles representan un riesgo.
Como parte de esta estrategia, instruyó a las secretarías del Medio Ambiente (Sedema) y de Obras y Servicios a incrementar recursos para el cuidado de árboles, fortalecer acciones de reforestación durante la temporada de lluvias, y fomentar la infraestructura verde como medida de resiliencia ecológica. Además, convocó a las 16 alcaldías a participar en estas acciones.
También se abrió una convocatoria ciudadana para que la población proponga árboles que puedan ser considerados patrimonio natural y elijan un nombre para ellos. “Invito a que la ciudad reconozca sus árboles. Ningún árbol monumental pasa desapercibido”, expresó la jefa de Gobierno.
Por su parte, la titular de Sedema, Julia Álvarez Icaza, destacó que el arbolado urbano tiene un valor ambiental, social e histórico, y recordó que es una demanda creciente entre la ciudadanía, especialmente tras las recientes lluvias que provocaron la caída de árboles en distintos puntos de la ciudad.
Álvarez Icaza subrayó que la distribución de áreas verdes en la capital es desigual. “Las zonas con mayor densidad de árboles coinciden con colonias de mayor poder adquisitivo, mientras que en otras, la ausencia de verde es evidente. Democratizar el acceso al verde es garantizar el derecho humano a un medio ambiente sano”, sostuvo.
Durante el evento, también se mencionaron especies emblemáticas como las jacarandas, introducidas por el jardinero japonés Tatsugoro Matsumoto, así como el eucalipto, cuya popularidad histórica contrasta con los problemas que ha causado debido a su alto consumo de agua y su impacto en el ecosistema local.
Los 12 árboles declarados patrimonio natural incluyen 10 ahuehuetes monumentales (ubicados en Cuauhtémoc, Azcapotzalco, Coyoacán, Miguel Hidalgo y Xochimilco), un laurel de la India en Benito Juárez y un fresno en Coyoacán.
En la ceremonia estuvieron presentes el secretario de Gobierno, César Cravioto; la alcaldesa de Azcapotzalco, Nancy Núñez Reséndiz; así como representantes vecinales y comunitarios.
Recomendaciones ciudadanas:
- Participar en la convocatoria para nominar árboles como patrimonio natural a través de los canales de Sedema.
- Cuidar y respetar los árboles urbanos; evitar dañar sus raíces, troncos o follaje.
- Reportar árboles enfermos o en riesgo a través de Locatel o directamente a la alcaldía correspondiente.
- Unirse o promover acciones de reforestación en parques, camellones o espacios públicos de sus colonias.
- Fomentar la siembra de especies nativas, adaptadas al clima y suelo del Valle de México.