
El Museo Jurásico del Parque Ecológico Ehécatl se convirtió este fin de semana en uno de los espacios culturales más visitados de Ecatepec, luego de que cientos de familias acudieran a la actividad especial conocida como Noche de Museos y Aventura Jurásica. El evento reunió a niñas, niños, jóvenes y adultos a un recorrido lleno de ciencia, naturaleza y convivencia comunitaria.
La jornada inició por la tarde, cuando visitantes de distintas colonias del municipio comenzaron a llegar al parque para aprovechar la oportunidad de explorar una de las atracciones más representativas de la zona: la piedra equinoccial del cerro Ehécatl. Durante el recorrido, las y los asistentes conocieron datos históricos del sitio, además de aprender sobre la importancia del ecosistema local.
Uno de los momentos más destacados fue la participación de estudiantes de Biología de la FES Iztacala de la UNAM, quienes ofrecieron talleres de paleontología y fósiles. A través de actividades prácticas y sencillas, las familias pudieron observar réplicas, aprender sobre especies extintas y comprender cómo se forman los fósiles, convirtiendo la experiencia en un acercamiento directo a la ciencia.
Los espacios del museo se llenaron de niñas y niños que mostraban entusiasmo al descubrir nuevas especies de dinosaurios, manipular piezas educativas y escuchar explicaciones adaptadas a su edad.
Funcionarios municipales destacaron que el Museo Jurásico se ha convertido en un punto de encuentro para promover la cultura, la ciencia y la recreación familiar. Explicaron que este tipo de eventos busca acercar a la ciudadanía a espacios educativos gratuitos y reforzar la idea de que Ecatepec cuenta con opciones culturales de calidad.
Asimismo, recordaron que Jurásica permanece abierta al público de martes a domingos de 10 a 17 horas y que cada fin de semana se realizan actividades pensadas para el desarrollo de niñas y niños. La intención es que más familias conozcan el sitio y aprovechen su oferta cultural sin necesidad de salir del municipio.
La Noche de Museos concluyó entre aplausos y fotografías frente a las figuras de dinosaurios que adornan el parque. Para muchos asistentes, la experiencia fue una oportunidad de convivencia segura y divertida, donde la ciencia, la naturaleza y la historia se unieron para crear un recorrido memorable.