
El papa León XIV criticó este domingo con dureza la codicia de los ricos, indiferentes al sufrimiento de los pueblos, en plena era de los magnates poderosos, como el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, o los dueños de redes sociales, como Elon Musk o Mark Zuckerberg.
“Hoy, en lugar de las multitudes que aparecen en el Evangelio, hay pueblos enteros, humillados por la codicia ajena aún más que por el hambre misma”, lamentó el pontífice estadounidense este domingo durante su primer Corpus Christi, celebrado a las puertas de la basílica de San Juan de Letrán, en Roma.
León XIV denunció que “ante la miseria de muchos en el mundo de hoy en día y en lugar de compartir, la opulencia desperdicia los frutos de la tierra y del trabajo del hombre, la acumulación de unos pocos es signo de una soberbia indiferente que produce dolor e injusticia”.
La reflexión del papa surgió al repasar el pasaje bíblico de la multiplicación de los panes y de los peces y, por eso, aseguró que para la iglesia este caso debe ser “un criterio urgente de acción y de servicio” para compartir y multiplicar la esperanza con “todos”.
La festividad del Corpus Christi proviene del conocido como “milagro de Bolsena”, ciudad en la que un sacerdote, en su camino hacia Roma, se detuvo en 1263 para oficiar misa y, ante sus dudas de la presencia de Cristo en la Eucaristía, pidió a Dios una “señal”.
La tradición católica asegura que, de manera imprevista, de la hostia consagrada emanaron algunas gotas de sangre que cayeron sobre el corporal, la tela que cubre el altar (con información de EFE).