
El Gobierno de Nigeria en coordinación con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y diversas agencias internacionales, puso en marcha un plan de formación sanitaria para enfrentar el brote de cólera que afecta al país y que ya ha provocado más de un centenar de muertes.
Un total de 150 trabajadores de primera línea, provenientes de los 36 estados nigerianos y de la capital, recibieron capacitación en detección temprana, notificación y tratamiento de la enfermedad. Además, la OMS desplegó equipos de respuesta rápida en los estados de Zamfara, Adamawa y Níger, entregó siete kits de diagnóstico, insumos médicos para 200 pacientes y 10,000 sobres de sales de rehidratación oral para uso comunitario.
De acuerdo con datos oficiales, hasta el 28 de julio se habían confirmado 4,700 casos y 113 fallecimientos, principalmente en comunidades afectadas por inundaciones y desplazamientos. “No solo respondemos a los brotes, también construimos sistemas para prevenir el próximo”, destacó Jide Idris, director del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Nigeria (NCDC).
La estrategia cuenta con el apoyo de UNICEF, WaterAid y la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja. Según la OMS, la respuesta se enmarca en la Hoja de Ruta Mundial para Poner Fin al Cólera en 2030, que promueve inversiones en agua, saneamiento, higiene y atención primaria de salud, así como un compromiso político y financiero sostenido.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de África alertó que los casos de cólera en el continente mantienen una tendencia al alza y podrían superar las cifras de años anteriores: 205,029 casos en lo que va de 2025 frente a los 254,075 de 2024 y 224,900 de 2023.