
El sector empresarial del país advirtió que los aranceles que se aplicaran a los artículos procedentes de China y otros países con los que no tenemos acuerdo comercial a partir del 1 de enero generará inflación y golpe al bolsillo de los mexicanos por lo cual pidió al Poder Legislativo que esa medida arancelaria se aplique de manera gradual y no de inmediato.
La Cámara de Diputados discute la iniciativa del gobierno de Claudia Sheinbaum para implementar aranceles de hasta 50% a productos importados desde Asia, donde destacan los autos, acero, textiles, entre otros, como una medida para compensar al mercado mexicano de precios subvaluados y equilibrar la competencia nacional con la extranjera.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) consideró a oportuno el impulso de la producción interna y de establecer condiciones más justas frente a prácticas desleales de comercio internacional pero reconoció que nuestro país aún carece de infraestructura para sustituir en sectores estratégicos los artículos procedentes sobre todo de China
“La industria mexicana aún carece de infraestructura suficiente para sustituir de forma inmediata ciertos bienes importados, como calzado, electrodomésticos, artículos escolares, juguetes y utensilios del hogar, lo que podría ocasionar desabasto y distorsiones en los costos de producción”, alertó el presidente de la Coparmex, Juan José Sierra
A través de un comunicado, el sector patronal expuso que el aumento propuesto a los aranceles de importación por parte del Ejecutivo Federal podría generar presiones inflacionarias y afectar directamente el poder adquisitivo de las familias mexicanas.
“Si México adopta incrementos abruptos sin atender su estructura industrial, el efecto sería contrario al deseado: las cadenas manufactureras mexicanas perderían competitividad y los bienes que exportamos a Estados Unidos y Canadá se encarecerían, afectando el objetivo regional de atraer inversión, generar empleo y ganar mercado frente a Asia y Europa”, acotó el organismo privado.
También, el presidente de la Coparmex alertó sobre los riesgos de establecer cuotas compensatorias o precios mínimos de importación sin un análisis adecuado, ya que estas medidas podrían incentivar el contrabando y la informalidad, afectando la competencia leal y la recaudación fiscal.
Para garantizar una transición efectiva hacia la sustitución de importaciones, la Coparmex propone un enfoque basado en el diálogo con los sectores productivos, acompañado de programas e incentivos financieros que fortalezcan a las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs).
Asimismo, destacó la necesidad de que las medidas sean compatibles con la integración del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) y el Plan México, con el objetivo de atraer inversión, generar empleo y mejorar la competitividad frente a otras regiones como Asia y Europa.
Para que la estrategia funcione, los ajustes arancelarios deben ser graduales, técnicamente sustentados y compatibles con la capacidad productiva local, de manera que refuercen la integración del T-MEC y la consolidación del Plan México.