
El Gobierno de México oficializó un nuevo aumento al salario mínimo que empezará a aplicarse desde el 1 de enero de 2026, marcando uno de los incrementos más relevantes en años recientes. La medida, acordada por la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) y anunciada por la presidenta Claudia Sheinbaum, busca fortalecer el poder adquisitivo de millones de trabajadoras y trabajadores ante los retos económicos del país.
¿Cuánto sube y desde cuándo entra en vigor?
A partir del 1 de enero de 2026, el salario mínimo general en México pasará de 278.80 pesos diarios a 315.04 pesos, lo que equivale a alrededor de 9 mil 582 pesos mensuales. En la Zona Libre de la Frontera Norte, donde el costo de vida suele ser más alto, el mínimo aumentará un 5%, quedando en 440.87 pesos diarios, es decir, cerca de 13 mil 409 pesos al mes.
El ajuste representa un incremento del 13% respecto al salario vigente en 2025, una tasa que refleja el consenso alcanzado entre gobierno, trabajadores y sectores empresariales para contrarrestar la inflación y mejorar las condiciones económicas de las familias.
¿Qué personas serán beneficiadas realmente?
El aumento beneficia directamente a quienes ganan el salario mínimo legal, un grupo que, según estimaciones oficiales, comprende alrededor de 8.5 millones de personas trabajadoras en todo el país.
Sin embargo, especialistas y economistas han aclarado que no todos los trabajadores verán un aumento automático en su salario en la misma proporción del 13%. El salario mínimo marca el piso legal que un empleador debe pagar, pero si un trabajador ya percibe un salario superior al mínimo, no existe una obligación legal de que su ingreso suba exactamente al mismo ritmo; esto depende de negociaciones internas, contratos colectivos y decisiones empresariales específicas.
Las autoridades han insistido en que el ajuste forma parte de una política salarial sostenida que México ha implementado desde 2018, cuyo objetivo es recuperar el poder adquisitivo de los ingresos más bajos y reducir la pobreza laboral. En los últimos años, el salario mínimo ha tenido incrementos continuos de dos dígitos, con el compromiso de acercarse a cubrir el valor de múltiples canastas básicas en el futuro.
Además del aumento al salario mínimo, el Gobierno federal ha propuesto reformas laborales de largo plazo, como la reducción paulatina de la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas, que podría comenzar a implementarse gradualmente hacia 2030 como parte de una estrategia más amplia de bienestar laboral.