
Jorge Armando Torres Landa Arciniega ha construido su nombre como uno de los referentes del desarrollo inmobiliario en México. Con más de 20 años de experiencia, ha liderado proyectos en Querétaro, su ciudad natal, y en distintas regiones del país, consolidando una trayectoria que combina visión empresarial, compromiso con los inversionistas y capacidad de adaptación ante los retos del sector.
Heredero de una de las familias más influyentes en bienes raíces, Torres Landa ha logrado mantener el legado familiar al tiempo que lo moderniza. Desde sus primeros pasos vendiendo casas de interés social y desarrollos de tiempo compartido, logró fundar su propia desarrolladora y comercializadora, donde ha enfrentado riesgos propios del negocio, pero también ha cosechado resultados significativos. “Desde joven comencé con proyectos pequeños hasta lograr fundar una desarrolladora donde hemos salido adelante pese a los riesgos que siempre existen, pero ahí vamos”, comparte el empresario.
Uno de los factores que, según Torres Landa, convierte a Querétaro en un destino privilegiado para los inversionistas es su ubicación geográfica. La conectividad con otros estados, la infraestructura en crecimiento y la cercanía con polos industriales y urbanos hacen que esta entidad sea atractiva para quienes buscan invertir en bienes raíces. Sin embargo, la clave, asegura, está en la certeza jurídica que respalda las inversiones.
“La certeza jurídica no quiere decir que no pasen cosas, sino que puedes denunciarlas y se persigue, a diferencia de otros lugares. Aquí hay un semáforo inmobiliario donde se puede ver todo el desarrollo, si está en regla, los permisos, los tiempos, todo lo que debes saber antes de invertir. Si decides invertir en proyectos que están en semáforo rojo, es tu responsabilidad”, explica Torres Landa.
El empresario enfatiza la importancia de conocer a fondo quién construye, opera y comercializa un inmueble, así como el perfil de riesgo que cada comprador está dispuesto a asumir. “Si quieres adquirir un departamento lo más barato posible, tu riesgo es alto; si prefieres seguridad, lo compras cuando ya está medio construido y con licencias, es más caro, pero dormirás más tranquilo”, asegura.
Su trayectoria, marcada por éxitos y lecciones aprendidas, le ha permitido tener una perspectiva madura del mercado. “He tenido aciertos y errores. El mundo del desarrollo inmobiliario es de los negocios más complejos, dependes de muchas circunstancias externas: gobierno, mercado, inflación, capital del comprador… No solo es poner ladrillos”, comenta. Cada error se ha transformado en aprendizaje, permitiéndole tomar decisiones más prudentes y estratégicas.
En cuanto al panorama económico nacional, Torres Landa reconoce la incertidumbre que genera la crisis económica actual. “Creo que primero se va a poner peor antes de mejorar; la incertidumbre provoca fuga de capitales, y eso ya se nota, estamos un 30% abajo de nuestros compromisos de venta a nivel nacional”, indica. A pesar de ello, mantiene una visión optimista a mediano plazo, destacando la posición estratégica de México, la mano de obra calificada y el potencial poblacional positivo. Sin embargo, advierte sobre el endeudamiento y la necesidad de equilibrio fiscal: “No gastar más de lo que ingresas es una regla básica de la economía. El país estará muy endeudado y esto afectará los impuestos”.
Más allá de los negocios, Torres Landa decidió compartir su experiencia en su primer libro: Edificando Sueños, más allá de las propiedades. La obra, publicada el año pasado, es una novela que busca inspirar a empresarios, emprendedores y cualquier persona interesada en liderazgo y crecimiento personal. El protagonista, Gio Forastieri, transmite lecciones y legados adquiridos a lo largo de su vida y sus experiencias en el sector inmobiliario. Según el autor, la intención no era crear un manual de inversiones, sino una obra que atrajera al lector mediante historias reales y memorias familiares. La novela está disponible en Amazon en versiones digital e impresa, y la segunda parte se lanzará el próximo año.
Para Torres Landa, la visibilidad es fundamental en la actualidad. “Hoy no es momento de estar tras bambalinas; tienes que mostrar que eres bueno en algo, porque si no lo haces, alguien más comunicará mejor que tú lo que hace, aunque no sea así. Este es el momento de brillar”, concluye. Su historia combina visión empresarial, aprendizaje constante y la convicción de que la inversión en bienes raíces en Querétaro sigue siendo una oportunidad sólida para quienes buscan crecer en un mercado competitivo.