Opinión

El peso del peso

Siempre ha pesado el nivel del peso en relación al dólar en la imagen de los presidentes de México. La famosa frase del expresidente López Portillo de que “Presidente que devalúa se devalúa” sigue teniendo actualidad entre nuestra clase política. Es más, los presidentes siempre se cuelgan esa medalla de la fortaleza del peso como mérito de su gobierno. Y en parte, pero sólo en parte tienen razón, ya que el manejo responsable de la economía es uno de los factores que inciden en el comportamiento de nuestra moneda. El no contraer más deuda de lo razonable, respetar la independencia del Banco de México, tomar medidas contra una inflación desbocada, cumplir con los compromisos de pagos internacionales, tener un manejo de política fiscal eficiente, son algunos de los elementos a considerar.

Favorece al peso la política del Banco de México

Favorece al peso la política del Banco de México

Cuartoscuro

En los últimos meses hemos observado un fortalecimiento del peso que llegó a cotizarse por debajo de los 17.90 pesos por dólar, si bien la semana pasada tuvo un retroceso y se ubicó en 18.35 por dólar. La moneda estadounidense se terminó vendiendo en 18.79 pesos, esto por preocupaciones de inversionistas sobre el mercado laboral resiliente en EU, así como las mayores tasas de interés que fueron insinuadas por el jefe de la FED Jerome Powell.

El gobierno de la autodenominada 4T, sigue dando muchos motivos para que se le cuestione. Sin embargo, se debe reconocer que el manejo de las finanzas públicas ha sido responsable y eso está influyendo favorablemente en la cotización del peso mexicano.

Y realmente es paradójico lo que ocurre en México ya que se han detonado varios problemas políticos con el ataque a organismos autónomos como el INE, que preside Lorenzo Córdova, las constantes críticas al poder judicial, a cargo de la ministra Norma Piña, las diversas reformas realizadas, en especial la energética y electoral, que han enrarecido el ambiente político y social , y sin embargo la economía marcha moderadamente bien, con un incremento de la inversión extranjera, mejora en el empleo, fortaleza del peso como consecuencia del debilitamiento del dólar y la entrada de capitales por el nearshoring, sin olvidar las remesas que han alcanzado cifras históricas pero que por el abaratamiento del peso se afecta a nuestra gente, que al cambiar los dólares que les envían sus familiares, reciben menos pesos.

Lee también

También favorece al peso la política del Banco de México que ofrece a los inversionistas un premio muy considerable con una tasa de interés de 11 por ciento, 6 puntos arriba de lo que ofrecen las tasas de interés en EU. Pero la fortaleza de nuestro peso es frágil, en cuanto EU eleve sus tasas de interés los capitales que no tienen nacionalidad, volarán hacia aquel país.

La realidad, según analistas de diversas instituciones financieras, es que el peso está sobrevaluado en más de 10 por ciento con relación al nivel actual de 18-50. Ha favorecido a importadores con menores precios que les permiten producir bienes más baratos, pero perjudica a los exportadores. En el mediano plazo, lo mejor para nuestra economía será tener un tipo de cambio cercano a su valor real que estará para fines del año, en alrededor de 20 pesos por dólar.

Amigo lector, lo invito a escuchar los temas que se tratan en esta columna por la Nueva Radio de la Ciudad de México 105.3 FM, en el programa que conduce diariamente Hannia Novell a las 5 de la tarde.

@fer_martinezg

fermx99@hotmail.com