La desaparición del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) era un asunto de tiempo, por lo que ahora el programa IMSS-Bienestar tiene la perspectiva de atender a la población sin seguridad social de manera más eficaz, señaló el doctor Gustavo Leal Fernández, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). 

“Estaba claro que las tareas del Insabi entraron en una complicación que evidentemente debería ser corregida lo más pronto posible y ahora eso es lo que estamos viendo con la decisión que se votó ayer en la Cámara de Diputados”, al poner los recursos de éste dentro de citado Organismo Público Descentralizado (OPD). 

De esta manera, “lo que pretende la actual administración es acercar los servicios sanitarios a los habitantes sin seguridad social, desafío enorme para el instituto comandado por Zoé Robledo, al que se han incorporado tres entidades que están siendo documentados cada quincena en la sección el Pulso de la Salud dentro de la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador”.

Costa Rica tomó una determinación similar hace algunos años y logró de algún modo atender a la gente sin seguridad social con un modelo que también amparaba una proporción similar al Seguro Social, dijo el académico del Departamento de Atención a la Salud de la Unidad Xochimilco.

Sin embargo, “la variable es la población, porque en México podría ser de 60 millones de personas para ser cubiertos con este nuevo aparato, reto de enorme complejidad porque pasada la pandemia se agravó el perfil de daños sanitarios en nuestro país”.

No obstante, “hay que atender colectividades no sólo rurales dispersas, sino semiurbanas y urbanas“, subrayó en entrevista luego de que se aprobara con 222 votos en favor el dictamen enviado al Senado para su análisis.

El especialista en salud, pensiones, vivienda y políticas sociales explicó que en la Casa abierta al tiempo “sabíamos desde hace tiempo que el Instituto desaparecería, porque estaba duplicando funciones y resulta una decisión acertada con el objetivo de acercar en forma eficaz y gratuita los servicios de salud a la población desprotegida”.

En cuanto al debate la víspera entre los grupos parlamentarios representados en la Cámara de Diputados, Leal Fernández anotó que “las posiciones más rezagadas que están en contra de todo lo que ha emprendido el gobierno de México en la materia, no están analizando el contenido del desafío del OPD, asunto que tenemos que tratar con toda seriedad”.

Hasta ahora “lo que aportan estos grupos hipercríticos es una descalificación automática de propuestas, que simple y sencillamente por venir del Ejecutivo están mal, con opiniones como aquella de un ex funcionario como Salomón Chertorivski, secretario de Salud en la administración de Felipe Calderón, quien afirmó que extinguir el Insabi es una demostración del fracaso actual”.

El académico de la UAM refirió que “el tono en el que se da la disputa parlamentaria es de mucha pobreza, pues tenemos a estos grupos que descalifican sin argumentar, sin analizar, sin enriquecer la discusión pública de lo que está en juego”.