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Más sabe un QB por viejo que por diablo

NFL Para algunos quarterbacks veteranos, la experiencia es una herramienta invaluable

Inició la temporada 2025 y no podemos negar que existían muchas interrogantes sobre jugadores, equipos, y en especial sobre algunos que eran verdadero motivo de morbo por ver su actuación, atestiguar su éxito o su fracaso, y en eso me refiero específicamente a Aaron Rodgers con Pittsburgh, y en menor medida a Joe Flacco con Cleveland; ambos pasadores sobrepasan los 40 años de edad y la verdad sea dicha, muchos, me incluyo, creímos que no les iría bien al abrir la campaña, no obstante, nos cerraron la boca, principalmente Rodgers, quien no sólo dirigió un ataque imaginativo, sino que demostró que su natural falta de movilidad por la edad la suple con creces gracias a su instinto para encontrar blancos y lanzar el balón de manera exacta a las manos de sus receptores.

No pocas fueron las ocasiones que los defensivos de los Jets sellaron posible salidas de la bolsa de protección y hasta lo presionaron de manera acosante, sin embargo, fue evidente la forma en que este quarterback sabe mantenerse a salvo en la bolsa con algunos leves movimientos para evadir defensivos y conectar pases casi con el sólo movimiento de la muñeca, ese es el valor de un mariscal veterano.

Para ser honestos, muchos creímos que los Jets se la cobrarían por la manera tan despectiva en que se comportó la campaña anterior siendo parte del equipo neoyorkino.

Rodgers sorprendió con lo enfocado que jugó el domingo con Pittsburgh, sus cuatro pases de anotación lo avalan, porque algo queda más que claro con este jugador, no se trata de si entrena o no, sino de la actitud que tenga, y al parecer se encuentra a gusto en Pittsburgh, al menos eso fue lo que se notó en la primera semana.

Tal vez la motivación jugó a su favor al enfrentar a los Jets y en Nueva York, donde nunca sabremos qué sucedió realmente en esa relación.

El otro quaterback veterano que llamó la atención fue Flacco en Ceveland, lanzó para casi 300 yardas y mantuvo siempre en la pelea a los Browns frente a un fuerte contendiente como Cincinnati. Al igual que Rodgers, Flacco suple la poca movilidad con inteligencia, colocación y visión.

La verdad sea dicha, nadie esperaba que fuera el quarterback titular de Cleveland, todo apuntaba para que el joven Kenny Pickett (ex Piitsburgh y Filaldefia) se quedara con el puesto, pero Flacco lo ganó, toda vez que hasta Indianapolis lo dejó ir tras firmar al joven Daniel Jones.

Con lo anterior queda más que claro que en la posición de mariscal de campo entre mayor sea la veterania mayor será el conocimiento y comprensión del juego, y algunas limitantes como la movilidad se suplen con lo aprendido con los años. Si lo dudan, miren el resumen de los juegos, y comprueben lo que digo.

No obstante, podríamos agregar que lo anterior no es una generalidad para todos los veteranos, no olvidemos que Rodgers y Flacco son ganadores de Super Bowl.

LA MALDICIÓN DE HEIDI

Quizá nadie recuerde el llamado “Heidi Game”, ese que en 1968 se hizo famoso por la radical y poco razonable decisión de la cadena NBC casi al final de juego entre los Jets y los Raiders.

Nueva York ganaba 32-29 cuando quedaba poco más de un minuto de juego, y los mandos de la televisora dieron por hecho que así terminaría el encuentro, así que cortaron la transmisión y dieron paso a la caricatura de Heidi, pues a las 7 pm era el turno de la serie animada.

La sorpresa fue que en esos poco más de 60 segundos de juego, Oakland anotó dos touchdowns y ganó por 43-32. Aquello fue un escándalo, pues la transmisión fue cortada en la Costa Este, no en la Oeste donde si vieron el encuentro completo.

La lección fue tal que, cuando los mismos equipos se vieron las caras en el juego por el título de la vieja AFL, la orden en la NBC fue clara: el juego se transmitiría de manera integra, y así lo hicieron. Los Jets ganaron esa vez 27-23 a los Raiders, y avanzaron al Super Bowl 3 para ganarle a los Potros de Baltimore.

¿Y a qué viene todo esto?, pues a lo que sucedió la noche del domingo en Buffalo, cuando mucha gente, tanto en el estadio como frente a las pantallas de televisión, dio por hecho la victoria de los Cuervos sobre los Bills ya entrado el último cuarto.

Con 11:42 en el reloj y 40-25 a favor de Baltimore muchos creyeron que estaba más que decidido, pero cuando la rivalidad existe, y más entre dos muy buenos equipos, todo puede pasar. Buffalo ganó 41-40, una situación que ni los mismos jugadores de ambos equipos podían asimilar.

Al final, como ya nos tiene acostumbrados la NFL, fue otro cierre trepidante, y tal como sucedió en el “Heidi Game”, estos dos conjuntos seguro se verán nuevamente las caras en la postemporada.

Sin embargo, podemos asegurar que fue el mejor encuentro de la jornada, superarlo estará difícil, y eso que vamos arrancando la campaña.

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