
La tragedia que enluta a los Dallas Cowboys ha tomado un giro aún más doloroso. El entrenador del equipo, Brian Schottenheimer, confirmó que la novia de Marshawn Kneeland, el joven jugador que falleció recientemente en un accidente automovilístico, está embarazada. El deportista de 23 años iba a convertirse en padre por primera vez.
Durante una emotiva conferencia de prensa, Schottenheimer expresó el profundo pesar que vive el equipo y destacó la fortaleza de la familia del jugador en estos momentos tan difíciles. “Marshawn era un chico extraordinario, lleno de energía, con un futuro brillante dentro y fuera del campo. Saber que iba a ser padre hace que esta pérdida sea aún más devastadora”, declaró el coach.
El legado de Marshawn Kneeland
Kneeland había sido seleccionado por los Cowboys en el Draft 2024 de la NFL y se perfilaba como una de las promesas defensivas más sólidas del equipo. Su desempeño durante los entrenamientos y partidos de pretemporada había llamado la atención de los aficionados y del cuerpo técnico, que veían en él un talento con gran proyección.
La noticia de su muerte generó una ola de mensajes de condolencias por parte de jugadores, excompañeros y fanáticos, quienes recordaron su carisma, disciplina y compromiso con el deporte.
Además de su pasión por el fútbol americano, Kneeland era conocido por su carácter solidario y su cercanía con la comunidad. Amigos cercanos revelaron que estaba emocionado por la llegada de su bebé, y que había hablado de lo importante que sería para él formar una familia.
El equipo de los Cowboys ha expresado su total apoyo a la familia del jugador y a su pareja, quienes enfrentan un doloroso proceso de duelo. Mientras tanto, aficionados y compañeros continúan rindiéndole tributo en redes sociales y en el estadio, donde su memoria sigue viva.
La historia de Marshawn Kneeland deja una huella imborrable: la de un joven talento que soñaba con triunfar en la NFL y conseguir una familia, sueños que la tragedia no logró borrar del todo.