La Universidad de Guadalajara (UdeG) ha enfrentado recientemente manifestaciones estudiantiles, protagonizadas por un grupo que busca desconocer a la poderosa Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) y exige mejores instalaciones, atención docente y condiciones académicas más favorables. La mayoría de las protestas se han concentrado en el CUCSH Belenes, especialmente en fechas cercanas a las elecciones estudiantiles.
Actualmente, los manifestantes continúan convocando a una Asamblea Interuniversitaria.

Ante esta situación, autoridades del departamento de Cultura sostuvieron una charla con el alumnado, en la que se enfatizó la importancia de mantener el diálogo y la responsabilidad. En sus palabras, la finalidad es evitar cualquier conflicto violento, al tiempo que se reconocen las demandas legítimas de los estudiantes, aunque también se advirtió sobre la injerencia de personas externas y movimientos políticos ajenos a la universidad.
Durante la reunión se explicó que la toma de instalaciones y la posible suspensión de la selección de la Consejería General podrían generar afectaciones importantes, como la interrupción de clases, procesos administrativos, becas y nóminas de profesores y trabajadores, lo que impactaría a toda la comunidad universitaria. Por ello, se pidió a los estudiantes responsabilidad al compartir información en redes sociales y contrastar los hechos antes de difundir noticias.
Las autoridades resaltaron que la universidad está dispuesta al diálogo y que la intención es establecer mesas de trabajo abiertas, sin violencia y con respeto a los derechos de todos. Se recordó que la UdeG es una institución pública de calidad, con profesores investigadores y que formar parte de ella implica también compromiso y responsabilidad por parte de la comunidad estudiantil.
Entre las acciones recientes de la universidad, se mencionó la aprobación de un plan maestro de infraestructura, que incluye la construcción de una biblioteca, un comedor, un gimnasio y áreas de estacionamiento, así como la implementación de espacios para lactancia y cuidados especiales para estudiantes madres. Las autoridades reconocieron que estas mejoras implican procesos presupuestales complejos, pero aseguraron que se está trabajando para atender las demandas.
Asimismo, se enfatizó que, pese a la exposición de las demandas estudiantiles, estas no deben ser politizadas ni distorsionadas en medios o redes sociales. Las autoridades aseguraron que se cuenta con evidencia sobre manipulación externa y que la universidad está comprometida en garantizar información veraz y transparente.
Finalmente, se reiteró el compromiso de mantener el diálogo abierto con los estudiantes, resolver inquietudes a nivel local y asegurar el correcto funcionamiento de la universidad, subrayando que la comunidad universitaria debe actuar con responsabilidad y confianza para fortalecer la convivencia y el desarrollo académico.