
La estrecha relación del llamado eje intestino-cerebro, que liga a la salud digestiva con la salud mental, ocasiona una conexión del estrés y la ansiedad, a partir de la irritación del sistema gastrointestinal.
Ello, debido a que el Sistema Nervioso Entérico (SNE), también llamado “pequeño cerebro”, “segundo cerebro” o “cerebro intestinal”, está formado por dos finas capas de más de 100 millones de células nerviosas que recubren el tracto gastrointestinal desde el esófago hasta el recto.
El Sistema Nervioso Entérico puede desencadenar grandes cambios emocionales en personas que presentan distintos padecimientos gastrointestinales como el síndrome del intestino irritable, estreñimiento, diarrea, hinchazón, dolor y malestar estomacal, señaló la doctora Cynthia Vega, directora de Relaciones Médicas de PiSA Farmacéutica.
En el país, más de 50 millones de personas han experimentado malestares en el sistema digestivo a lo largo de su vida, los cuales pueden tener un impacto en la calidad de vida, aunado al hecho de que a nivel nacional, se estima que entre el 16% y 30% de la población padece síndrome de colon o intestino irritable, mejor conocido como colitis, padecimiento que se presenta de manera regular a partir de una alimentación rica en azúcar, fructuosa y grasas, situaciones de estrés o alguna infección intestinal.
En este mismo sentido, señaló que la actividad entre el sistema digestivo y el cerebro estaría relacionada con el desarrollo de depresión y ansiedad en un mayor número de personas que presentan alguno de estos padecimientos.
Por ello, resaltó, es importante que las personas en general se procuren una alimentación sana, así como evitar el sedentarismo y control del estrés, ya que todos estos son factores que pueden contribuir al incremento casos de enfermedades del aparato digestivo.
Subrayó que la recurrencia de síntomas como dolor o ardor de estómago, agruras, inflamación abdominal extrema, acumulación de gases, estreñimiento, baja o aumento del apetito, son signos de deterioro en la salud digestiva que no se deben normalizar.
La doctora Cinthya Vega enfatizó que si las casusas de los malestares digestivos no son atendidas oportunamente pueden contribuir al desarrollo de distintas patologías como gastritis, colitis, reflujo gastroesofágico, síndrome del intestino irritable, diverticulitis, hasta algo más grave como cáncer de colon.
La especialista, resaltó que a fin de que las personas se procuren una adecuada calidad de vida, es importante tener presente que no es normal, sentirse mal, y tampoco tener este tipo de trastornos de manera recurrente, por lo que se debe acudir al especialista para contar con un diagnóstico oportuno respecto de los diversos padecimientos gastrointestinales y contar con un tratamiento médico adecuado, ya que las funciones metabólicas más conocidas del aparato digestivo, actualmente se ha identificado que existe una relación estrecha entre la digestión, la salud, el estado de ánimo e incluso los procesos mentales, debido a que la actividad del sistema digestivo también puede afectar la función cognitiva, es decir la capacidad de pensar y la memoria.