
Estamos cerca de superar el cierre de la frontera para el ganado en pie mexicano. La cooperación internacional funciona cuando hay ciencia, diálogo y confianza mutua, por lo que seguiremos trabajando para defender la sanidad, la competitividad del sector cárnico y la estabilidad de miles de familias que viven del campo. La reapertura de la frontera es inminente, estará basada en resultados concretos de campo, una vigilancia sanitaria sólida y a que la cooperación técnica entre ambos países está más fuerte que nunca.
Alonso Fernández Flores, presidente de la Asociación Nacional de Establecimientos Tipo Inspección Federal (ANETIF) aunque reconoció que México está cerca de superar el cierre de la frontera para el ganado en pie mexicano hacia Estados Unidos, hay un fuerte impacto por esta prohibición.
Sostuvo que “aunque ya hay avances, el impacto sigue siendo fuerte: se están dejando de exportar aproximadamente 5,700 cabezas de ganado al día, lo que representa transacciones de más de 11 millones de dólares diarios que se están dejando de realizar”.
También, abundó, hay presión en corrales, costos de alimentación, y riesgo de afectaciones logísticas en plantas de procesamiento.
Pese a la situación que se vive en el país, aclaró que la plaga no afecta a los productos cárnicos que llegan a los consumidores.
Explicó que la mosca deposita sus huevecillos solamente en heridas de animales de sangre caliente vivos, en tanto que los productos elaborados en establecimientos tipo inspección federal, pasan por una inspección muy estricta por parte del gobierno federal, a través de sus Inspectores del SENASICA.
Ahí, añadió, se examinan rigurosamente el ganado o los productos cárnicos que ingresan a los establecimientos certificados TIF de todos los eslabones de la cadena alimentaria, desde rastros hasta salas de proceso y frigoríficos, los cuales garantizan que el producto esté libre, no solamente del gusano barrenador de ganado, sino también de todas las enfermedades que pueden representar un riesgo para la salud pública del consumidor.
Fernández Flores subrayó que gracias al trabajo conjunto entre productores, autoridades estatales, SENASICA, y organismos nacionales, el número de casos nuevos ha caído 75%: de 120 a solo 30 semanales, lo que demuestra que la estrategia sanitaria está funcionando y que México ha respondido con rapidez y eficiencia, además de que los 21 millones de dólares que invertirá Estados Unidos para ampliar la planta de producción de moscas estériles en Metapa, Chiapas, serán suficientes e importantes, ya que será una gran herramienta de erradicación del gusano barrenador del ganado.
En este sentido, externó su confianza en que la próxima misión técnica del USDA que llegará a México para evaluar en campo los avances, será decisiva para validar los compromisos y determinar si se puede levantar la suspensión.
“Los organismos del sector agroalimentario mexicano estamos muy optimistas, y reconocemos la voluntad técnica y política de ambos gobiernos. Confiamos en que la reapertura será una realidad en los próximos días”, externó.
Añadió que la reciente reunión del secretario de Agricultura de México, Julio Berdegué, con su contraparte de Estados Unidos, Brooke Rollins, tuvo como punto de acuerdo tres ejes hacia la reapertura de la frontera: estrategia de regionalización sanitaria, para aislar zonas afectadas del sur y proteger al norte del país, fortalecimiento de controles de movimiento y vigilancia epidemiológica y una inversión de 21 millones de dólares del USDA para ampliar la planta de producción de moscas estériles en Metapa, Chiapas, lo que refuerza la Técnica del Insecto Estéril como medida clave de erradicación.
Actualmente, las operaciones de producción y dispersión de insectos estériles apoyadas por Estados Unidos en México y Centroamérica operan a plena capacidad, con hasta 44 vuelos semanales que liberan 100 millones de moscas estériles. Todas estas moscas son criadas actualmente en la instalación COPEG (Comisión Panamá-Estados Unidos para la Erradicación y Prevención del Gusano Barrenador) ubicada en Panamá. Esta inversión en la planta de Metapa permitiría al departamento de agricultura estadunidense (USDA) duplicar el uso de la técnica de insectos estériles (SIT).
Alonso Fernández enfatizó la urgencia de reanudar el comercio, y hacerlo con bases técnicas sólidas y sostenibles, para evitar un mayor impacto en la industria cárnica.