
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este miércoles que posiblemente dejará expirar en 2026 el T-MEC, el tratado de libre comercio de EE.UU., México y Canadá, y buscará acuerdos bilaterales con sus socios o bien un nuevo acuerdo comercial desde cero, ampliamente favorable a los intereses de su país.
“Vence en aproximadamente un año, y lo dejaremos vencer o tal vez lleguemos a otro acuerdo con México y Canadá”, declaró Trump durante una rueda de prensa en el Despacho Oval de la Casa Blanca.
“México y Canadá se han aprovechado de la situación. No los culpo, sino a los tres países, porque teníamos gente estúpida al mando, mucha gente estúpida al mando”, agregó en referencia al anterior gobierno demócrata de Joe Biden, pese a que el T-MEC fue negociado durante su primer mandato.
Trump justificó su postura señalando que considera que los socios comerciales han obtenido ventajas desproporcionadas en la relación trilateral. Según su perspectiva, esto habría resultado en la salida de empresas estadounidenses hacia territorio mexicano y canadiense.
Defensa de los aranceles
Durante su intervención, Trump defendió los aranceles que ha impuesto a sus vecinos norteamericanos, asegurando que estos están ayudando a mejorar los ingresos del país y a reducir la deuda nacional.
El presidente hizo especial referencia a los aranceles a automóviles y autopartes que, según dijo, han provocado que empresas trasladen su producción a Estados Unidos.
“No estarían aquí hoy si no tuviéramos aranceles; estarían construyendo sus plantas en México y otros lugares. Se van de México y de Canadá; todos están regresando, es algo grandioso”, declaró.
El tratado entre los tres países contiene disposiciones modernas sobre comercio digital, propiedad intelectual, reglas laborales y medioambientales, así como estrictas normas de origen para la industria automotriz, buscando fortalecer la producción regional y mantener aranceles reducidos entre todas las partes.
De acuerdo con centros de estudio, este tratado ha sido clave para la relación económica norteamericana, facilitando el flujo de bienes agrícolas e industriales y estableciendo un marco legal que protege inversiones y derechos de los trabajadores.
Analistas han advertido que la eventual expiración o renegociación del T-MEC podría afectar la estabilidad comercial en la región y reconfigurar las cadenas de suministro entre los tres países vecinos.
El Tratado México-Estados Unidos-Canadá entró en vigor en 2018 en sustitución del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que el republicano consideraba perjudicial para Estados Unidos.
Los tres países deben revisar el tratado en 2026 y decidir si lo extienden por otros 16 años o si lo revisan de forma anual hasta 2036, cuando finalizaría el T-MEC (con información de EFE).