Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México (Banxico), afirmó que la política monetaria aún tiene margen para reducir la tasa real —actualmente en 5%— sin perder su carácter restrictivo, aunque advirtió que cualquier decisión deberá tomarse con cautela en la segunda mitad del año. “Podemos seguir bajando la tasa, pero no llevarla a territorio neutral”, señaló.
Heath subrayó que si bien la inflación general se ubica por debajo del 4%, todavía falta un último esfuerzo para alcanzar la meta del 3%. La inflación subyacente, dijo, ha mostrado resistencia, particularmente por el comportamiento de los servicios alimenticios y turísticos, que mantienen niveles por encima del 7%.
A pesar de un crecimiento positivo del PIB en el primer trimestre, Heath mencionó que indicadores como la inversión fija bruta, la producción industrial y la confianza empresarial presentan señales de deterioro. “Esto indica una brecha de producto más negativa, que reduce las presiones inflacionarias”, explicó.
Sobre los riesgos, destacó el repunte de la inflación en mercancías, que pasó de 2.3% en noviembre de 2024 a 3.3% en abril de 2025. Esta alza complica el descenso de la inflación subyacente, cuya trayectoria se ha estancado.
El subgobernador también comentó que el diferencial de tasas con la Reserva Federal será poco relevante en el corto plazo, pero podría adquirir mayor peso si la Fed retrasa sus recortes mientras Banxico sigue bajando su tasa.