Por favor: ¡No se enferme!
La buena noticia es que el gasto en salud 2022 se incrementará 15 por ciento con respecto a 2020. Algo así como 105 mil millones de pesos adicionales.
Cuartoscuro
Las malas noticias son varias; de entrada, una buena parte del incremento se irá a rubros administrativos. Otra cuarta parte se destinará a vacunación infantil, pero solo servirá para tapar el bache generado por el gobierno actual. Según cifras del INEGI, apenas 18.5 por ciento de menores de un año tiene el esquema de vacunación completo; el resto tiene varias vacunas, pero no todas, pues la 4T reventó el Sistema Nacional de Vacunación que tan bien funcionaba.
Respecto al COVID19, se contará con 28 mil millones de pesos para vacunas en 2022. No sé si es suficiente, porque nunca supimos cuánto se gastó este año porque ¡no fue presupuestado!
Otra mala noticia es que no sabemos cuánto se destinará a vigilancia epidemiológica, pues el llamado de la OMS a hacer “¡pruebas, pruebas y más pruebas!” fue ignorado. Un dato: para la epidemia de influenza (2009), el gobierno –neoliberal y pérfido- de Felipe Calderón destinó mil 354 millones para vigilancia epidemiológica. Para la pandemia COVID19, la 4T destinó 533 millones de pesos en 2020 y en 2021 bajó a 332 millones de pesos, siendo el COVID más letal.
El programa IMSS-Bienestar, el cual atiende a población rural, recibirá buenas noticias: 63 por ciento de incremento (10 mil millones de pesos). Sin que el Presupuesto de Egresos de la Federación lo especifique, es de suponer que con esos recursos se construirán 40 hospitales regionales prometidos por la Presidencia. Al final del sexenio serán 120 nuevos hospitales; ojalá que pueda mantenerse ese nivel de gasto.
La mala noticia es que no se ve un incremento para la promoción y atención directa a la población. Lo menciono porque me encontré datos alarmantes.
En 2017, IMSS-Bienestar dio 25.5 millones de consultas; en 2019 bajaron a 15.4 millones y todavía no había pandemia. Para 2020 se redujeron las consultas a ¡11 millones! No en balde, el IMSS-Bienestar tiene la tasa de atención más baja de todo el sistema de salud (CIEP, 2021).
Además, les cuento el siguiente caso:
Varias familias de San Felipe del Progreso, Estado de México, estuvieron afiliadas al IMSS-Prospera durante varios años. El personal médico daba consultas regulares, poniendo atención en la medicina preventiva; por ejemplo, si las mujeres no se hacían la mastografía, pasaban el reporte y les detenían momentáneamente el apoyo económico para que se hicieran el estudio en cuestión.
Al iniciar la 4T, la autoridad local dijo a estas familias que era el momento de ceder su lugar a otros. Suena descabellado, pero así se aplican las políticas públicas a nivel local, sobre todo cuando se ideologiza todo.
Lo digo porque San Felipe había sido muy priista y la anterior presidencia municipal recayó en un morenista. Ni modo…
POSTDATA:
Buena noticia para la conectividad. En 2021, “zzi” hizo una fuerte inversión en instalar más de 10 mil antenas o “izzi spots” en espacios públicos de todo el país, para que sus suscriptores puedan acceder a wifi gratuito cuando se encuentren fuera de sus hogares y/o negocios.
Los “izzi spots” se ubican en aeropuertos, centros comerciales, restaurantes, parques, estaciones de servicio y universidades, entre otros. Para conectarse a internet en los "izzi spots", los suscriptores deben ingresar su clave de acceso izzi en sus dispositivos.
La ubicación de cada uno de los miles de “izzi spots” se encuentra en la “izzi app” o en https://www.izzi.mx/coberturaizziwifi.
Investigación: Upa Ruiz upa@delfos.com.mx