Opinión

Norma en pie de guerra

Norma Otilia Hernández está decidida a que Morena pague una abultada factura política por sacarla de la jugada.

La alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández

La alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández

Cuartoscuro

Norma es alcaldesa de Chilpancingo y quiere reelegirse. Morena, sin embargo, optó por otras cartas. Aunque la razón visible es la reunión de la alcaldesa con un jefe criminal de la zona, líder de Los Ardillos, capturada en un video que se viralizó, lo cierto es que hay un rompimiento entre ella y la gobernadora Evelyn Salgado, quien no la quiere en el estado.

No obstante Hernández sabe meter las manos y ha logrado desactivar candidatos propuestos por Morena para tomar su lugar en la boleta. Guerrero es un río revuelto, por eso nadie termina por arreglar el caso Chilpancingo.

La distancia entre la alcaldesa y la gobernadora es cada día más grande. Cualquier cosa puede ocurrir.

Sin operación cicatriz

En Tabasco, conforme avanza la campaña, se profundiza el distanciamiento entre los equipos de Javier May y Adán Augusto López. Las heridas que abrió el proceso interno no cicatrizan y nadie está haciendo trabajo político para restañarlas.

López no le perdona al candidato May que se haya formado en la ventanilla de Claudia Sheinbaum. Se resiste a dejar de ser el hombre fuerte de Tabasco. Si bien el presidente eligió como candidato a May, también es verdad que ubicó a Adán Augusto en el primer lugar de la lista nacional de Morena para candidatos plurinominales.

El jaloneo no pone en riesgo el triunfo de Morena que tiene en Tabasco una ventaja descomunal, pero sí genera tensiones que pudieran descarrilarse en cualquier momento.

Lo que dicen allá es que Adán Augusto quiere negociar posiciones ahora, y no después de la elección de junio, ya que un eventual triunfo de la doctora Sheinbaum en la elección presidencial lo dejaría en una posición vulnerable.

La policía a la campaña

Cuando algunos pensaban que ya habían visto todo, la policía de Morelos resolvió meterse a la campaña electoral en la entidad.

Como la candidata opositora, Lucy Meza, criticó la inseguridad imperante, el jefe de la policía resolvió acudir a los tribunales para demandarla por daño moral, justo a la mitad de las campañas.

Es, según la óptica de la afectada, un caso de persecución política desde el poder. Meza, no hay que olvidarlo, era hasta hace poca senadora morenista, pero chocó con el ex gobernador Blanco, dejó al partido y la oposición la fichó de inmediato.

Más allá de los jaloneos partidistas está el tema de la inseguridad en la entidad, por la nefasta herencia de Cuauhtémoc Blanco. ¿Cómo será la protección a la candidata Meza si el jefe de la policía la tiene demandada?

Los ciudadanos jóvenes

En la elección de junio estarán en posibilidad de votar más de 26 millones de ciudadanos jóvenes menores de 30 años de edad. Los partidos políticos quieren atraerlos a su causa, pero no saben cómo hacerlo. Según estadísticas, alrededor del 60 por ciento de ellos acude a las urnas.

Son ciudadanos que asimilan la información política en las redes sociales y en pláticas con sus amigos y suelen descalificar a la clase política en su conjunto. Pero son demasiados y hay que ir por ellos.

Ya los candidatos presidenciales se han metido a algunos planteles de educación superior con suerte desigual. De hecho, MC privilegia acudir a las universidades antes que organizar mítines en plazas públicas. Hasta el momento no se ha reflejado en los sondeos si esa estrategia le sirve.

Después de la emboscada a Enrique Peña en la Iberoamericana, los candidatos quieren reunirse con jóvenes, pero en ambientes controlados, para no terminar huyendo.

Lee también