Cultura

Carlos Pellicer: “Al pintar, me interesa la fidelidad a mi sentimiento y emoción”


Presenta su exposición “Desde la ventana”, con 30 obras que se exhibirán en el Seminario de Cultura Mexicana

entrevista

Una de las obras de la exposición de Carlos Pellicer.

Una de las obras de la exposición de Carlos Pellicer.

Cortesía del artista

Pinto con placer y alegría y eso es lo que busco compartir”, declara el artista Carlos Pellicer López (Ciudad de México, 1948), en conversación por la exposición “Desde la ventana”, que reúne treinta pinturas de paisajes en formato mediano y grande realizadas entre 1999 y el año pasado 2022.

Para él, los paisajes expresan emociones íntimas, a través de armonías de colores y formas que lo conmueven hasta la fecha cuando mira a través de una ventana.

“Lo que alcanzo a ver a través de las ventanas me sigue despertando curiosidad y gusto. Por eso trato de reproducirlos, pero de manera más objetiva en la obra”, explica respecto de la muestra que inaugurará este sábado 23 de septiembre, en la Galería 526 del Seminario de Cultura Mexicana (Av. Presidente Masaryk 526, colonia Polanco),

Carlos Pellicer López estudió en la Escuela Nacional de Artes Plásticas a finales de los años sesenta y hace más de 20 años que pinta paisajes.

“Cuando empecé, pintar era salir al campo con mi caballete, mi estuche y plantarme frente al paisaje para copiarlo lo más fiel que yo podía. Con el tiempo eso ha cambiado, me doy cuenta que no me interesa tanto la fidelidad hacia el objeto del paisaje, sino me interesa la fidelidad a mi sentimiento, a lo que la vista del paisaje me despierta, me emociona”, relata sobre la evolución que ha observado en su pintura a lo largo del tiempo.

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En su trayectoria, Pellicer López ha presentado su trabajo en exposiciones colectivas e individuales, en recintos como el Museo de Arte Carrillo Gil, el Museo de Aguascalientes, el Museo de Arte Moderno Gómez Palacio, en Durango; el Ex Convento del Carmen, en Guadalajara; los Institutos culturales de México, en San Antonio, Texas y en España; el Centro Cultural Jardín Borda, en Cuernavaca; la Pinacoteca Diego Rivera, en Xalapa; la Galería Metropolitana, en la Ciudad de México o el Museo de Arte Abstracto Manuel Felguérez, en Zacatecas, entre otros.

Asimismo su obra se encuentra en relevantes colecciones públicas y privadas, aunque él considera que exponer no es un ejercicio que haga a menudo y, cuando lo hace, lo considera una retrospectiva sobre su trabajo.

Así como en esta exposición caben cuadros realizados en 1999, el artista señala que en bodega tiene guardados muchos otros que todavía no se exhibe.

“Generalmente lo que hago es repintar los cuadros –no los tiro, ni los destruyo- los repinto cuando juzgo que están muy mal y así siento que se va depurando lo que se expone. Lo que hacen los escritores es que guardan la obra por meses o años y si no han pasado por ese periodo no publican, así se van madurando como los buenos vinos: si de veras son buenos, los puedes guardar años”, continúa.

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“En todo caso, me gusta la constancia de mi gusto por pintar paisaje”, manifiesta sobre el género pictórico que ha sido su predilección.

En tanto que hijo de un escritor, Carlos Pellicer López no menosprecia la relación que puede llegar a tener una sucesión de palabras bien hiladas con la armonía de los colores.

¿Qué cabe en dicha armonía? Cabe todo porque hay muchas maneras de acomodar colores y posibilidades diferentes de armonías: “frías, cálidas, inesperadas y otras que no ocurren frecuentemente”, según describe el pintor.

“El lenguaje del color es literal como el lenguaje de las palabras: infinito, las combinaciones ilimitadas y por eso es tan atractivo. Qué más quisiera uno que los cuadros fueran buenos poemas, de eso se trata, pero me doy cuenta que no es tan fácil ni sencillo, ni común encontrarlos”, agrega.

LA EXPOSICIÓN

La entrada a “Desde la ventana” es gratuita. Puede visitarse en Av. Presidente Masaryk 526 (Polanco, CDMX) de martes a domingo, en un horario de 11:00 a 18:00 horas, a partir del 23 de septiembre y al 19 de noviembre de 2023.

La exposición se acompaña con la edición de un catálogo ilustrado, que incluye un ensayo del escritor y Premio Crónica Juan Villoro, quien por su parte establece: “Carlos Pellicer López tiene tanta vida interior que la usa para pintar exteriores. La paradoja se explica de este modo: sus paisajes son el complemento de un artista que no deja de pensar. Cada cuadro proviene de un largo diálogo con las circunstancias que lo hicieron posible. No estamos ante espacios ficticios, sino reflexionados. El pintor transforma experiencias en colores. La naturaleza es en este caso un desafío mental; Pellicer López no retrata: interpreta”.