Cultura

 Antonio Boggiano: el nexo entre un apellido italiano y los esclavos cubanos del siglo XIX

Se  presenta en México el libro Herederos Boggiano, una historia de esclavitud y libertad en la Cuba del siglo XIX

libro

Cristiano Boggiano.

Cristiano Berti.

Cuando el artista italiano Cristiano Berti (Turín, 1967) llegó a la ciudad cubana de Trinidad para investigar sobre la historia de Antonio Boggiano, un comerciante acaudalado que vivió allá en el siglo XIX, encontró lo que no buscaba.

Lo primero que llamó su atención fue que buscando un alojamiento el propietario se apellidara Boggiano. Lo que nunca esperó es que ese señor Boggiano, el mismo que lo recogió en la estación del autobús, fuera afrodescendiente.

“Le pregunté cuántos Boggiano había en la ciudad y me dijo que eran muchos, de una sola familia, pero no todos parientes. ¿Cómo podía ser?”, cuenta Berti, quien como resultado de sus pesquisas en la isla publicó el libro Herederos Boggiano (Quodlibet 2023), editado en español, inglés e italiano y que promueve en Ciudad de México.

Antonio Boggiano nació en Savona, Italia, en 1778, y murió en 1860 en Trinidad de Cuba. Ahí se asentó, fue padre de varios hijos y tuvo un gran negocio cafetalero.

Al indagar sobre la historia del comerciante –quien estuvo involucrado en la comisión de obras de arte públicas en mármol italiano, y encargó el altar de la iglesia más importante de Trinidad-, Cristiano Berti descubrió que su apellido se extendió entre la población afrodescendiente de Cuba a través de los esclavos de su plantación.

Con una mirada cercana a la de un historiador, un detective o un arqueólogo apasionado de la genealogía, el artista desenterró una historia jamás contada: el hilo de un linaje de esclavitud, cuyos descendientes también ignoraban. Llenó un vacío, un silencio que atraviesa todas las historias de los oprimidos.

“Porque los esclavos nunca tuvieron voz”, explica el investigador. Para él, el verdadero legado de Boggiano está en un apellido que comparten cientos de cubanos, cuyo origen fue signo de opresión y esclavitud, pero que hoy lo es de identidad.

Según el derecho consuetudinario vigente en los territorios de la Corona española en América, una persona esclavizada recibía de forma automática el apellido del amo. La investigación de campo y de fuentes primarias realizada por Berti revela que los ciudadanos cubanos que hoy llevan el apellido Boggiano no solo descienden de las esclavas y los esclavos del antiguo emigrante, si no de aquellos que pudieron comprar su libertad.

“Hoy los Boggiano son profesores universitarios, científicos, arquitectos”, comenta Berti, quien vive y trabaja en Jesi, Italia.

La pesquisa sobre Boggiano tiene su origen en una investigación anterior, en la que Berti encontró una relación entre una cantera de mármol abandonada en los Alpes italianos y una fuente monumental neoclásica, de mármol blanco, en La Habana.

Lo que ligaba a ambos lugares era Giuseppe Gaggini, escultor y concesionario de la cantera, quien hizo dos fuentes en la capital cubana, en 1836. Tuvo dos intermediarios, uno de ellos, Antonio Boggiano. Su curiosidad por el personaje, lo llevó al viaje que culminó con la publicación de Herederos Boggiano.

Se trata de un libro de artista, dice Berti, que forma parte de un proyecto más amplio: Ciclos fútiles, que involucra investigación archivística y artística, y que está integrado por esta publicación, una instalación, y un video.

Publicado con apoyo de la Dirección General Creatividad Contemporánea del Ministerio de la Cultura italiano en el marco del programa Italian Council, el título será presentado hoy (3 de mayo) en la librería Exit (Pánuco 215, colonia Cuauhtémoc, CDMX.), a las 19:00 horas, en un conversatorio entre el autor con Benjamín Mayer Foulkes, director de 17, Instituto de Estudios Críticos.