“Dos dedos enormes de bronce que se señalan y te señalan preguntándonos qué es la igualdad y qué tan iguales somos”, expresó el artista mexicano Rivelino (Jalisco, 1973) a propósito de la instalación permanente de su escultura monumental Tú en el Museo Memoria y Tolerancia, ubicado sobre Avenida Juárez 8, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.

La obra que se exhibió por primera vez en Trafalgar Square, Londres, para después exhibirse en Monterrey y Guadalajara podrá visitarse como una pieza (de 1.60 x 7.4 x 1.30 metros) que da la bienvenida al Museo Memoria y Tolerancia.

“Hoy será la primera vez que una pieza mía quede de forma permanente en el Centro Histórico. Esta obra habitará en el pórtico del museo estará muy bien acompañada por otras obras increíbles como la pieza del maestro Siqueiros, la fuente del maestro Vicente Rojo y las esculturas que están en la entrada de Relaciones Exteriores del maestro Juan Soriano. Me siento muy emocionado por esta compañía”, indicó Rivelino.

Parte de mi trabajo en el espacio público busca generar diálogos con la memoria colectiva, añadió el artista.

“Mi obra altera el presente del espectador y su experiencia en el entorno urbano ya que no sólo interviene de manera física el espacio, sino que por momentos busca modificar la identidad y el uso cotidiano del sitio”, dijo.

Rivelino también destacó que la memoria, la libertad y los derechos humanos son desde hace más de 15 años el eje principal de su trabajo en el entorno urbano.

“Con mis intervenciones hago una especie de artivismo, señalando y evidenciando lo urgente de manera monumental. El Museo Memoria y Tolerancia abre sus puertas no las cierra, brinda a la ciudad un espacio necesario que antes no tenía donde los pueblos opuestos pueden dialogar, donde los distintos tienen voz, donde la diferencia merece atención, donde la discusión ante la igualdad es un tema permanente”, indicó.

Al respecto, Sharon Zaga Mograbi, presidenta y cofundadora del recinto, señaló que el museo no tuvo oportunidad de festejar sus 11 años de apertura debido a la pandemia y es con Tú que lo festejan.

“Es la única pieza, después del Cubo, que es permanente en el museo. Este museo no es de arte, nunca quisimos hacer un museo que tenga piezas artísticas que es lo que hacen los museos, es un paseo por la conciencia, el arte también provoca conciencia y sobre todo esta obra monumental que sólo te deja cuestionarte por qué estás aquí, qué tipo de persona eres”, comentó.

Tú fue una escultura donada al museo por Rodrigo Lebois quien se refirió a la presencia del dedo índice en las obras de arte.

“Tú representa dos dedos índices, uno frente al otro, el dedo índice señalando el dedo que advierte, que acusa, el dedo en los labios que ordena silencio, el dedo que señala la dirección única ha sido representado millones de veces en el mundo del arte. El dedo índice es señal de poder o confrontación, el dedo índice de Dios nos enfrente al dedo índice de Adán, lo señala; el poder omnímodo del dedo lo pintó Miguel Ángel en el fresco de la Capilla Sixtina que también expresa el encuentro entre Dios y el hombre”, indicó.