Cultura

“Los sistemas financieros dictaminan modo en que podemos vivir y circular en el mundo”


El escritor habla de su novela “Fortuna”, ganadora del Premio Pulitzer 2023 y en la cual narra la vida de magnates

entrevista

Es curioso pensar que el dinero media casi todas las relaciones que establecemos día a día, explica Hernán Díaz.

Es curioso pensar que el dinero media casi todas las relaciones que establecemos día a día, explica Hernán Díaz.

Las artes deberían de ocupar un lugar central en cada país y deberían estar protegidas, el origen del capitalismo no es Estados Unidos sino Inglaterra y el dinero es el elemento que permite imaginar una versión de la realidad, ésas son algunas ideas que plantea en entrevista Hernán Díaz (Buenos Aires, 1973), autor de “Fortuna”, novela ganadora del Premio Pulitzer 2023.

El libro, editado por Anagrama, narra la historia de Benjamín, un magnate que decide casarse con Helen, hija de unos aristócratas excéntricos, juntos convierten su matrimonio en la sociedad perfecta y su patrimonio crece sin límites a pesar de las crisis económicas. No obstante, el autor devela en otro capítulo que el verdadero nombre de Benjamín es Andrew y el de Helen es Mildred, ya que la historia contada anteriormente es una novela.

¿Los magnates son los autores de nuestros sueños y son los escritores de la realidad?

No sé si es tan directo que un puñado de hombres, porque en general son hombres, tienen una especie de habitación oculta fumando cigarros, diseñando la realidad, creo que es un poco más impersonal que eso, creo que es el dinero mismo, los sistemas financieros los que dictaminan el modo en que podemos vivir, en que podemos circular por el mundo.

Es curioso pensar que el dinero media casi todas las relaciones que establecemos día a día, determinan nuestra existencia diaria de modo radical, el dinero puede hacer la diferencia entre vida y muerte, es así de poderoso el dinero. Sin embargo, es una institución sobre la cual no tenemos ningún control. Más que los magnates, el dinero como institución es la que nos condiciona.

Cada quien vive su vida inmersa en el lenguaje, no existe un afuera del lenguaje y todas las relaciones que estableces durante el transcurso del día están mediadas por el lenguaje. El dinero es muy similar, no existe un afuera del dinero, en este momento nuestro, ambos estamos trabajando de modo diferente, no estamos intercambiando billetes, pero es una relación mediada por el dinero, el dinero es el que nos permite imaginar, por ejemplo, una casa. El dinero nos permite imaginar nuestra versión de la realidad.

Hablas del arte ligado al dinero a través del personaje de Helen. En México se mira el mecenazgo como la opción de un modelo financiero, ¿qué opinión te merece?

Me he beneficiado de varios de esos mecenas bajo la forma de becas, residencias, premios, que son financiados por algunas de estas fortunas norteamericanas, pero no creo que sea el sistema a seguir, prefiero el sistema europeo donde el Estado subvenciona las artes y, en última instancia, tiene que ver con ciertas políticas impositivas que protejan más a los artistas.

El arte es demasiado importante como para dejarlo al libre albedrío de un puñado de familias ricas que beneficiarán a quienes quieran, como quieran y cuando quieran; está buenísimo que existan, pero no me parece que debiera ser el único modo, creo que las artes deberían de ocupar un lugar más central y estar más protegidas.

¿Hay un autoconocimiento en Estados Unidos de que su país es señalado como la cuna del capitalismo?

No sé si estoy de acuerdo, el comienzo del capitalismo tal como lo conocemos es la Revolución Industrial y la cuna de esa revolución es Inglaterra, no Estados Unidos, y Marx en general, en casi todos los ejemplos, provienen más de Inglaterra, por supuesto que los Estados Unidos tomaron la delantera, pero si la pregunta pasa por la génesis del capitalismo, no estoy tan seguro.

Hay de todo como aquí en México, las grandes fortunas mexicanas son realmente inmensas y no tienen nada que envidiarle a las grandes fortunas norteamericanas. Hay gente muy crítica, muy complaciente, hay grandes magnates que son una muestra de avaricia espeluznante y otros que dentro de su riqueza tratan de pensar mínimamente en los demás.

En la esfera pública e intelectual por supuesto que la gente piensa en el rol que ha jugado Estados Unidos en la historia del capital, hay bibliotecas enteras por autores norteamericanos acerca de este problema, sin lugar a dudas.

¿Por qué la mención de archivos como eje de tu novela?

En la literatura hay una tensión entre lo extremadamente íntimo, lo personal, la voz de la conciencia y lo absolutamente universal, en los grandes retratos sociales o ideas con cierta pretensión de trascendencia que no estén limitadas a opiniones personales, existe la novela interior de un personaje monologando sin relacionarse con el mundo y existe la novela realista donde vemos el desarrollo de grandes procesos históricos a lo largo de siglos.

Esa distinción me interesaba, por un lado está la especie de vector de la historia que creemos poder ver y por otro lado, la intimidad absoluta que se ve con el diario.

El archivo es lo que nos permite entender ambos polos, el de la intimidad y el de la dimensión épica porque es en el archivo donde encontramos tanto los indicios secretos de vidas privadas como los detalles que en última instancia nos permiten retratar del modo más fidedigno posible un gran movimiento social.

La novela.

La novela.