Nikki Hiltz y Lia Thomas: destinos contrapuestos de deportistas transgénero para Olímpicos 2024
En el marco de los Juegos Olímpicos de París 2024, te presentamos dos historias sobre la participación de mujeres transgénero en el deporte.
parís 2024
Los Juegos Olímpicos de París 2024 tienen una historia en cada deportista que busca competir en la justa veraniega, y la participación de atletas transgénero sigue siendo un tema polémico. En particular, las historias de Nikki Hiltz y Lia Thomas destacan las diferencias en las regulaciones y los destinos de los deportistas trans. Mientras Hiltz se prepara para competir, Thomas ha sido excluida.
Nikki Hiltz, deportista trans y no binaria en busca de una medalla olímpica
Tiene 29 años, es un atleta de media distancia que figura en el atletismo estadounidense. Asignada como mujer al nacer, Hiltz se identifica como transgénero y no binaria. Su trayectoria deportiva es muy interesante y prometedora, culminando en un registro histórico en la final de los 1500 metros femeniles con un tiempo de 3 horas y 55 minutos en los trials olímpicos de Estados Unidos, superando el récord anterior y convirtiéndose en una de las favoritas para ganar medallas en París.
La posibilidad de que Hiltz compita en los Juegos Olímpicos se debe en gran parte a las regulaciones de World Athletics, que permiten a los atletas asignados como femeninos al nacer competir en categorías femeninas sin las restricciones adicionales impuestas a los atletas transgénero asignados como masculinos al nacer. Este enfoque permitió a Hiltz concentrarse en su rendimiento deportivo sin enfrentarse a los mismos obstáculos que otros atletas trans.
“Tengo un sistema de apoyo increíble. Mi familia siempre me ha aceptado, cuando salí del clóset sobre mi sexualidad y luego cuando hablé de mi identidad de género. Sólo sé que muchas personas queer no tienen ese amor y apoyo”, señaló Nikki Hiltz ante medios.
Lia Thomas: ¿Por qué no va a los Juegos Olímpicos de París?
Lia Thomas, nadadora transgénero, ha tenido una experiencia muy diferente. Thomas, quien comenzó su transición en 2019 después de competir como hombre, se destacó al convertirse en la primera nadadora transgénero en ganar un título universitario en Estados Unidos en 2022. Sin embargo, su éxito fue objeto de controversia debido a las percepciones de ventajas fisiológicas por haber competido anteriormente como hombre.
Desde 2021, el Comité Olímpico Internacional (COI) permite a las federaciones internacionales regular el acceso de los deportistas transgénero a las competiciones, con un equilibrio entre la equidad deportiva y la no discriminación. En el caso de la natación, World Aquatics decidió crear una "categoría abierta" para atletas transgénero, restringiendo la participación en las categorías femeninas a aquellas atletas que hayan completado su transición antes de la pubertad. Este criterio, también adoptado por la Unión Ciclista Internacional (UCI) y World Athletics, resultó en la exclusión de Thomas de las competiciones femeninas.
Thomas apeló esta decisión ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), argumentando que se sentía "excluida" de las competiciones femeninas. Sin embargo, su apelación fue desestimada, lo que significa que no podrá competir en los Juegos Olímpicos de París 2024. Esta decisión refleja la complejidad y las controversias que rodean la participación de atletas transgénero en el deporte de élite.
La participación de Nikki Hiltz en París 2024 es un testimonio de los avances logrados, mientras que la exclusión de Lia Thomas mantiene encendido el debate sobre si se debe permitir a las mujeres transgénero competir en los deportes femeninos.
"Aunque ha habido luchas en el camino, la transición y ser fiel a mí mismo me ha traído tanta alegría y paz mental. Todas las personas merecen la oportunidad de ser auténticos libres de acoso y discriminación", escribió Lia Thomas antes de se ser excluida de los Juegos Olímpicos de París 2024.