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Putin promete fondos ilimitados a su ejército para tratar de ganar la guerra en Ucrania

Eleva a 30 años la edad de reclutamiento mientras promete bases navales y drones para cada pelotón

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Vladímir Putin, este miércoles 21 de diciembre de 2022 en Moscú.

Vladímir Putin, este miércoles 21 de diciembre de 2022 en Moscú.

EFE / Sergey Fadeichev / Kremlin / Pool

No existe ningún tipo de limitación a la financiación de las necesidades del Ejército ruso en la "operación militar especial" en Ucrania, declaró este miércoles el dictador de Rusia, Vladímir Putin, al inaugurar una reunión con la plana mayor del Ministerio de Defensa del país.

"No tenemos ningún tipo de limitaciones en la financiación, el país y el Gobierno dan todo lo que pide el Ejército, todo", afirmó. "En el campo de batalla no puede haber detalles menores", aseguró.

"Por ello es necesario dedicar una atención especial, y quiero subrayarlo aunque sé que el Ministerio (de Defensa) se ocupa de esto, a los botiquines médicos, la alimentación de campaña, los uniformes, el calzado, los cascos, los chalecos antibala, todo debe ser lo más moderno y de la mejor calidad", dijo.

Lo primero para el ejército es garantizar su suministro de soldados, y para ello Putin aprobó este miércoles la propuesta de ampliar hasta los 30 años la edad en la que pueden ser llamados a filas los ciudadanos rusos, medida que puede provocar un nuevo éxodo de hombres en edad militar.

El ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, propuso la medida, que eleva en tres años la edad actual de reclutamiento, que estaba fijada en los 27 años.

Además, el ministro aseguró que se ofrecerá a cada recluta desde el primer día la posibilidad de firmar un contrato profesional con el Ejército.

Precisamente, las organizaciones de derechos humanos denunciaron que, pese a las promesas de Putin, los reclutas sí combatieron en Ucrania y muchos otros fueron presionados para firmar contratos contra su voluntad.

El anuncio amenaza con incrementar aun más la cifra de cientos de miles de rusos que han abandonado el país desde los primeros meses de la guerra. Un éxodo que, además, se disparó tras el decreto de movilización firmado por Putin en septiembre.

Shoigú admitió este miércoles que la movilización se enfrentó a muchas dificultades, aunque destacó que, aparte de los 300 mil reservistas y los 20 mil voluntarios, 830 mil hombres fueron eximidos por trabajar en empresas o servicios vitales para el funcionamiento del Estado.

Además, planteó a Putin la posibilidad de incrementar el número de efectivos del Ejército ruso hasta los 1.5 millones, la mitad de ellos profesionales, cuando ahora apenas rebasan el millón.

DRONES, BASES Y ARMAS NUCLEARES

Putin añadió que, como parte de esta generosidad con el ejército, cada pelotón deberá disponer de un dron para combatir al "enemigo" en Ucrania, cuyo territorio ha sido bombardeado en los últimos meses por Rusia con drones fabricados en países como Irán.

“La experiencia de la operación militar especial demuestra que el uso de drones se ha vuelto prácticamente generalizado. Dicho arsenal debe estar presente en cada unidad, pelotón, compañía y batallón”, dijo Putin durante una reunión con la plana mayor del Ministerio de Defensa de Ucrania.

Putin subrayó que los aparatos no tripulados deben estar integrados en el marco de una red de inteligencia conjunta que disponga de canales de comunicación directa con los mandos. “En breve cada soldado debe disponer de la posibilidad de recibir la información emitida por los drones. A eso hay que aspirar”, subrayó.

Rusia, además, planea instalar bases navales en los puertos de las ciudades de Berdiánsk y Mariúpol, en las regiones anexionadas de Zaporiyia y Donetsk, en Ucrania, afirmó Shoigú.

"Hoy día funcionan plenamente los puertos de Berdiánsk y Mariúpol. Prevemos desplegar allí puntos de emplazamiento naval para buques de apoyo, servicios de emergencia y unidades de reparación de la Armada", señaló.

Finalmente, Putin llamó a mejorar la capacidad de la tríada nuclear del país integrada por la aviación estratégica, los misiles intercontinentales y los submarinos atómicos.

Consideró la tríada "la principal garantía" de la soberanía e integridad territorial rusa, el equilibrio de fuerzas en el mundo y la paridad nuclear con Estados Unidos y destacó que el porcentaje de armamento moderno en las fuerzas estratégicas nucleares rusas "supera el 91 por ciento".