En el libro “Coordenadas para el debate del Desarrollo” del Informe del Desarrollo en México, hay un diagnóstico claro de la situación actual del desarrollo de nuestro país y el entorno mundial. “Cómo esta pandemia, fatal enfermedad ha incidido en todos los ámbitos de la vida política económica, social y personal de todos nosotros. Y luego, propuestas que son muy precisas y puntales sobre lo que tenemos que hacer”, declaró el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue Wiechers, durante la presentación de este trabajo multidisciplinar e interinstitucional, coordinado por el Programa Universitario de Estudios del Desarrollo (PUED), respaldado y promovido por la UNAM.

La presentación fue transmitida a través del canal oficial de UNAM Global TV. Graue felicitó a los 15 becarios que trabajaron de la mano con académicos del programa a lo largo de 2 años en la investigación y conformación de este libro.

“Hay temas que por su naturaleza requieren del trabajo multidisciplinar e interdisciplinar. Cuando esto se identifica, la Universidad crea los programas, los ampara y promueve. Es el fruto de trabajo académico colegiado con visiones distintas que permite a la universidad presentar resultados. El resultado de este trabajo se difundirá ampliamente porque la Universidad lo respalda”, añadió.

El Coordinador del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo, Rolando Cordera Campos explicó que este es el sexto Informe del Desarrollo en México que realiza el Programa; y consideró que ofrece una reflexión sistemática y estratégica que los mexicanos debemos construir como visión ante las agresivas coyunturas que se han enfrentado recientemente (caída económica y SARS-CoV-2).

“En otras ocasiones más propicias tuvimos oportunidad de presentarlo en la Cámara de Diputados ante las comisiones. Esperamos poder hacerlo el año entrante, si el panorama se aclara. Por el momento, lo ponemos en circulación”, comentó.

ENFRENTAR NUEVAS REALIDADES.

Entre las propuestas contenidas en el libro para afrontar los escenarios económicos, sociales y ambientales derivados de la pandemia COVID-19, el Presidente de la Fundación para la Democracia Alternativa y Debate, A.C, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano destacó la de un sistema universal de seguridad social, la implementación de renta básica universal, así como una profunda reforma hacendaria, fiscal y tributaria -“que garantice los recursos necesarios a largo plazo a largo plazo de una política acorde a estos tiempos”-. Consideró que se trata de soluciones viables para atender las desigualdades sociales crecientes y expresó que para conseguir un México distinto se requiere una gestión pública diferente a la de los últimos 40 años.

“Revertir las actuales condiciones requiere más que responsabilizar de ello a los individuos que tomaron las decisiones en el pasado y si a este respecto hubo atropellos a la ley siempre es tiempo de fincar las responsabilidades que corresponden. Es tiempo de poner en práctica políticas públicas para superar estas condiciones. Un poder democrático legítimamente alcanzado y constituido tiene sin duda posibilidades de rectificar, modificar o modernizar y poner caminos distintos en lo que considere que debe hacerse. Tiene la responsabilidad ante presente y futuro de impulsar acciones que impriman dinámicas positivas”, manifestó.

También subrayó la urgencia de atender la debilidad institucional del Estado mexicano para un futuro con estabilidad. “La debilidad del estado mexicano es un tema generalmente ajeno al debate político, ausente hasta hoy en las propuestas partidarias, y fundamental si queremos un futuro de estabilidad social, económica y política”, agregó.

Por su parte, Alfonso Ramírez Cuéllar, coordinador del Grupo de Trabajo para la Transición Hacendaria aseguró que se requiere construir una nueva decisión política para avanzar hacia un segundo piso de la política de bienestar; un paso indispensable que tiene relación con la capacidad fiscal y financiera del Estado.

Planteó cinco medidas: conseguir la fortaleza financiera de los estados y los municipios mediante las reformas del predial y la tenencia vehicular; la progresividad del ISR en las personas físicas; pelear los beneficios de los impuestos mínimos a las multinacionales y el control de la tasa efectivamente pagada de los grandes contribuyentes del país; la actualización fiscal de las regulaciones en materia de emisiones y de los derechos de agua; así como la reorganización de las contribuciones por consumo de alcohol, tabaco, bebidas azucaradas y comida chatarra, a fin de destinarlas al sector salud.