Escenario

“Colitas de algodón o la rebelión de las ratas”; fábula que aborda las desiguales sociales

Esta obra con idea original del actor, maestro y director Roberto Duarte, busca satirizar el panorama sociopolítico contemporáneo y retratar con humor la polarización de la identidad social, de clase y de raza

Colitas de algodón: La rebelión de las ratas
Especial Especial (La Crónica de Hoy)

Reflexionar sobre la realidad de las desigualdades sociales en un tema nada fácil de analizar, de desmenuzar y mucho menos expresar, por lo que es a través de la fábula titulada “Colitas de algodón o la rebelión de las ratas”, escrita por Roberto Duarte y Daniel Ferreira, que se busca transmitir un mensaje de lo que es la posible verdad sobre las clases sociales.

Esta puesta en escena se estrenará el próximo 5 de abril en el Teatro Silvia Pinal, donde el objetivo es que el espectador se divierta, que analice la realidad del lugar en el que vivimos y reflexione sobre la etiqueta que se ha puesto a las desigualdades sociales.

Roberto Duarte cuenta a Crónica que la idea original de esta puesta en escena comenzó hace algunos años como un regalo para sus sobrinos, a quienes les encantaban los cuentos ilustrados, y ahora, finalmente. se llevará al escenario este tema polémico en el que se abordan las clases sociales, el racismo y la discriminación de género, lo que ha sido causa de censura en México por abordar asuntos considerados políticamente incorrectos, pero que ya ha sido aclamada y valorada en Austria.

Las divergencias sociales a través de la obra “Colitas de algodón o la rebelión de las ratas” se abordan en un drama entre la disparidad que existe entre roedores (ardillas y ratas), donde las de cola esponjada gobiernan el parque y son alimentadas por los humanos, mientras que la otra especie es repudiada y vive bajo la sombra del alcantarillado. Sin embargo, un día al observar esta situación de marcada diferencia, con un grito de revolución, las ratas salen a la superficie y provocan un caos total.

Esta es una sátira sobre la sociedad, y en palabra del autor, “busca la reflexión sobre la cuestión racial y acerca de cómo las diferencias de la piel, en este caso del pelo, de la cola, determinan los privilegios, los rangos y la posibilidad de movimiento social de un individuo”.

— ¿Cómo surgió la idea de escribir “Colitas de algodón o la rebelión de las ratas”?

La historia es larga, a mis sobrinos, que ahora ya unos adolescentes, cuando eran nenes les gustaban mucho los cuentos ilustrados, estos álbumes que contienen frases muy cortas que se complementan con la ilustración y que van contando una historia. Estos libros les encantaban muchísimo y yo quería que tuvieran uno escrito por su tío, entonces escribí un cuentito corto, que son 12 frases.

—¿De qué trata en esencia la obra?

Es una fábula, un estilo que pone en la voz de animales los vicios humanos. Entonces, estamos hablando de la división de clases. Son cuatro estaciones, primavera, verano, otoño e invierno en los que se desarrolla la obra en un parque, donde las ardillas son las reinas y señoras, pero no se percatan que son observadas todo el tiempo, desde la alcantarilla, por un grupo de ratas, que se cuestionan del por qué las ardillas viven en la superficie y reciben de manos humanas el alimento y ellas están confinadas a vivir en la mierda, por lo que un día salen de las alcantarillas al grito “a cada roedor, colitas de algodón”, demandando igualdad. Es una sátira social que pone en evidencia la historia de los movimientos revolucionarios, con humor, ya que hay temas que nos duelen tanto que necesitamos el humor para poder sanarlos.

Esta eterna lucha de clases es el motor que mueve la humanidad y una vez cada tanto se repiten los movimientos revolucionarios cuando las diferencias se vuelven a hacer insoportables. Entonces estamos transitando un momento en donde las diferencias están siendo insoportables, que la tensión social, no solo en México, sino en el mundo entero, se comienza a respirar.

—El tema es controversial, ¿enfrentaste problemas para llevarla al teatro?

La historia se quedó guardadita mucho tiempo, pero años más tarde un grupo de estudiantes me buscó porque querían hacer un espectáculo y nos pusimos a buscar en la improvisación las posibilidades, yo les dije que tenía un cuentito que a lo mejor nos podía servir, y ahí comenzó a nacer “Colitas de algodón”. Sin embargo, fue hasta años más tarde cuando se convirtió en una obra de teatro. La construimos Daniel Ferreira y yo, para que se presentara en el “Carro de Comedias de la UNAM, pero la universidad decidió que era políticamente incorrecta. Posteriormente, un amigo mío se fue a estudiar una maestría de dirección de escena en Austria y cuando terminó su master nos pidió el texto para aplicar en una convocatoria del Ministerio de Cultura Austríaco, así que la tradujo al alemán y ganó.

--¿Crees que haberse presentado en el extranjero abrió su camino en México?

“A esta obra, que a la universidad en su momento le pareció incorrecta, en Austria le dieron el sí por el valor social que posee y el tema que aborda, fue así que estuvo tres años en cartelera. A partir de eso, nos convencimos de montarla con nuestros propios medios. Por fortuna, el año pasado tuve muy buen trabajo como actor protagonizando dos series, y eso ahorita se está invirtiendo para hacer “Colitas de algodón” en México y para el público para el que fue escrita.

—¿Quiénes conforman el elenco de “Colitas de algodón”?

Un grupo de actores que en su momento fueron mis alumnos, en ese proceso del “Carro de comedias” en la UNAM. Lo importante ha sido darle continuidad al trabajo, porque las condiciones de empleo para los actores de México son muy complejas, hay estructuras que imposibilitan el libre desarrollo de los artistas, pero los actores nunca cedemos en nuestra voluntad, necedad y nuestro amor por el quehacer. Por lo que, entregar hoy “Colitas de algodón” es algo que nos tiene profundamente felices y es un proceso que estamos disfrutando cada día. El nivel estético y artístico que está alcanzando el trabajo con todos los actores y creativos es de verdad una belleza, sin precedentes en el teatro de nuestro país, estoy seguro. El elenco está conformado por Ana María Aparicio, Alejandro Arreola, Diana Becerril, Jenny Diosdado, Marcela Feregrino, Carolina Gómez de Orozco, Ana Belem López, Rafael Mejía, Gabriel de Teresa, Baruch Valdés y Emmanuel Varela.

—¿Cómo se está preparando la obra?

La caracterización se está llevando a cabo por Aimeé Aranda, que para mí en el tema de la animalidad de los actores era primordial y el resultado es un nivel estático precioso. Los vestuarios están a cargo de María Manchini y Adriana Oliveira. La música es original y será en vivo, tendremos una orquesta de cucarachas que va a acompañar el drama de las ratas y las ardillas, y los narradores van a hacer un coro de moscas. Va a hacer un espectáculo visualmente muy divertido, pero que nos va a invitar a una reflexión muy profunda, con la amabilidad de la risa, porque es el sentido que debe tener la auténtica comedia, ayudarnos a exorcizar con la risa nuestros profundos dolores sociales y así poder sanarlos.

—¿Qué mensaje dejará esta fábula a los espectadores?

Les puedo asegurar un mensaje con mucha diversión, un espectáculo totalmente extraordinario y además nos invita a dar el valor a las obras mexicanas, nuestro teatro. También tenemos grandes historias que pueden convertirse en franquicias, para ser reproducidas en el mundo. Y que al igual es una utopía, no existe la igualdad de clases, razas, géneros, no existe, son distintas, lo que tiene que ser igual son las condiciones de desarrollo para todos. A lo que nos invita con urgencia es a darnos cuenta de que ya no estamos para estar discutiendo por eso, porque se nos está acabando el agua, el calentamiento global es una realidad, lo que estamos haciendo con el planeta ya nos pone a todos en un extremo de igualdad, porque nos vamos a quedar sin agua todos, ricos y pobres. Y si nos seguimos peleando por quien tiene más dinero, quién está más bonito o más feo y/o a que Dios le reza, cuando la cosa que realmente es urgente, la está marcando el planeta. Sin embargo, hoy, los partidos políticos continúan marcando esta división, chairos y fifís, sin tocar realmente el problema. De eso va “Colitas de algodón” llevar estos temas tan complejos a través de la fábula, algo muy importante, invitándonos desde la esperanza que es una facultad humana, no es un elemento político.

--Además de “Colitas de algodón o la rebelión de las ratas” ¿qué otro proyecto tienes en puerta?

Este año es muy importante para mí, en mayo se estrena una serie muy importante de Amazon, de la cual formó parte, así que mi carita estará visible en muchos lados.

“Colitas de algodón o la rebelión de las ratas” se estrenará el próximo 5 de abril en el Teatro Silvia Pinal y tendrá funciones los días viernes y sábado a las 20:00 horas y el domingo a la 17:00 horas. El 1 de marzo salen los boletos en preventa a través de TicketPoint.

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